La crisis económica que generó el gobierno Javier Milei provocó un desastre en la industria nacional y muchas empresas cerraron sus puertas o redujeron sus plantas, provocando despidos masivos.
La caída del consumo por la pérdida de poder adquisitivo y la imposibilidad de competir con productos del exterior por la apertura de importaciones son los denominadores comunes en la gran mayoría de las compañías que realizaron "reestructuraciones" por la coyuntura actual.
Respecto de esta situación, la consultora Sistémica enumeró todos los casos de ese tipo que ocurrieron en el último trimestre. El resultado es que 21 empresas realizaron despidos y 4.382 trabajadores se quedaron sin su fuente de ingresos.
Asimismo, detalló que las regiones donde la crisis golpeó más fuerte fueron la provincia de Buenos Aires, Santa Fe y el NOA y las desvinculaciones se dieron en todo tipo de rubros.
La empresa que más despidos realizó es la fábrica de cerámica ILVA, que cerró su planta de Pilar despidiendo 300 trabajadores. Otra que tuvo un fuerte impacto fue Whirlpool, que desvinculó a 220 empleados tras el cierre de su fábrica en la misma localidad.
Los vecinos de Pilar no solo sufrieron estos duros golpes, sino que también 60 operarios de la farmacéutica Magnera corrieron la misma suerte, dejando un saldo de 580 trabajadores en la calle en la misma zona.
Otras dos empresas que hicieron un recorte profundo fueron la autopartista Corven de Santa Fe y la fábrica de productos electrónicos de Tierra del Fuego Newsan que echaron a 150 empleados cada uno. Números similares se dieron en SFK, de Tortuguitas, también dedicada a las autopartes, y la empresa láctea La Suipachense que desvincularon a 143 y 140 trabajadores respectivamente.
También en esa línea, efectuaron despidos las textiles Tn y Platex (88) Vulcalar (80) y Luxo (40), la fábrica de envases Panpack (80), la autopartista DANA (50) y la mueblería Color Living (40). Además, dejaron en la calle trabajadores las metalúrgicas Acerías Berisso (50) y Essen (34), la empresa alimenticia Otito (40) y la planta de productos eléctricos DBT-Cramaco (37).
Las empresas también suspendieron trabajadores
Además de los despidos, las empresas también realizaron suspensiones, en muchos casos argumentando que era la única manera de evitar desvinculaciones. En ese sentido, la alimenticia Mondelez está a la cabeza del ranking con 2.300 suspensiones de su planta de General Pacheco y lo siguen Acindar con 200 trabajadores afectados en la planta de Villa Constitución y Textiliana, dueña de la marca Mauro Sergio, con 175 suspensiones en Mar del Plata.
Lo mismo sucedió con Stellantis, que frenó la producción en su planta de El Palomar, donde se producen los modelos Peugeot 208, 2008 y Partner, y Citroën Berlingo, aunque no se conoce el número exacto de trabajadores afectados.
