La motosierra de la administración de Javier Milei estuvo centrada en derrumbar todo tipo de inversión pública en infraestructura en las provincias, además de licuarle los ingresos a jubilados. El plan de ajuste alcanzó a la provincia de Santa Fe y puso en jaque la continuidad de obras clave para el territorio. En este marco, la empresa encargada de llevar adelante la obra de ampliación de la planta potabilizadora de Aguas Santafesinas (ASSA) en la ciudad de Santa Fe tomó la decisión de paralizar completamente las tareas.
Las reuniones entre las partes fueron infructuosas y el nivel de deuda de Nación continuó aumentando. El secretario de Agua y Saneamiento del Gobierno provincial, Leonel Marmiroli, aseguró que el total suma “alrededor de 250 millones de pesos”. Según confirmó el medio local AIRE, la paralización de los trabajos se hará efectiva entre esta semana y la próxima. Por el momento, aún se desconoce si el gobierno de Maximiliano Pullaro se podrá hacer cargo de los trabajos, acordar con Nación, pagar la deuda y renegociar con la UTE encargada.
La obra de ampliación comenzó en mayo de 2022, pero sobre el final de la gestión de Alberto Fernández se detuvo y recién se logró reactivar a mediados del 2024. En aquella oportunidad, el Gobierno nacional se comprometió a continuar los trabajos y cumplir estrictamente con los pagos. Sin embargo, eso ocurrió solo en partes, ya que el Ejecutivo no envía los fondos de los certificados de obra desde octubre y el nivel de avances representa solo del 13%.
A la inminente paralización de la obra en Santa Fe se suma la que ocurrió a fines de febrero en Baigorria, también por certificados de obras adeudados. Entre las dos plantas, el monto de deuda de Nación supera los 700 millones de pesos. Mientras se aguarda la reactivación de los pagos nacionales, Marmiroli afirmó que los ministros de Obras Públicas provincial, Lisandro Enrico, y de Economía, Pablo Olivares, buscan "alternativas para garantizar la continuidad de la planta de Assa en Santa Fe".
MÁS INFO
El ministro Enrico es uno de los funcionarios de Pullaro que remarca constantemente la falta de recursos y el nulo mantenimiento de las rutas. Si bien el mandatario radical le facilitó los votos de sus legisladores al Gobierno nacional para la aprobación de la Ley Bases y también firmó el Pacto de Mayo durante 2024, el Presidente decidió reducir la inversión pública para infraestructura de todas maneras.
A comienzos de este año, Enrico planteó que "la realidad es dramática", ya que "la gente vive estresada, andar en una ruta nacional que no hay quien corte el pasto, que tiene pozos, es muy inseguro". "Hay que invertir en esto", advirtió y planteó que Santa Fe "es una provincia que paga muchísimo dinero en retenciones, por eso necesita mínimamente que, por lo menos, reparen la ruta".
Planta de Aguas Santafesinas en Santa Fe: de qué se trata la obra
La construcción de la nueva planta potabilizadora tiene como objetivo incrementar un 80% la producción de agua potable en la ciudad de Santa Fe para poder mejorar el servicio de más de 400 mil personas. Se pasará de 8.050 metros cúbicos por hora a 14.500 metros cúbicos.
Los trabajos incluyen la realización de una nueva toma sobre el río Santa Fe, paralela a la toma Hernández, que consistirá en un acueducto de agua cruda de 850 metros de extensión hasta la planta de barrio Candioti, donde se instalarán dos módulos de alta tasa de producción que generarán los más de 6.200 metros cúbicos que se anexarán.
El atraso en los pagos se junta con otra polémica decisión del gobierno de Milei que en noviembre anunció la disolución del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA), ente descentralizado que funcionaba realizando tareas paralelas a las de la Subsecretaría de Recursos Hídricos (SSRH), dependiente de la Secretaría de Obras Públicas.
Ambos organismos se encargaban de administrar y ejecutar obras hidráulicas, de agua potable y saneamiento a nivel nacional. A partir de eso, la SSRH absorbió las funciones del ENOHSA.