El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, no la dejó pasar. Cuando estaba hablando en la reunión virtual con el presidente Alberto Fernández sobre la necesidad de implementar restricciones a la circulación para frenar la propagación del virus, aprovechó para "gastar" al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien horas antes había informado que había dado positivo de coronavirus.
"Como pasó con Horacio, que se contagió en CABA y después fue a la Provincia a llevar el virus", ironizó. El jefe de Gobierno le quiso contestar, pero estaba "muteado". "No sigas hablando Horacio porque no te vamos a habilitar el micrófono", siguió Kicillof con la broma que festejaron todos los conectados al encuentro.
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Rodríguez Larreta viajó a Cariló junto a sus hijas y tenía pensado regresar el miércoles, pero decidió volver un día antes cuando empezó a sentir los síntomas. El lunes por la noche participó en una cena política en la casa que tiene en el balneario el jefe del bloque de diputados del PRO, Cristian Ritondo, de la que también participaron el intendente de Pinamar, Martín Yeza, los funcionarios porteños Lucas Delfino y Fernando Straface y el hermano del jefe de gobierno Augusto Rodríguez Larreta. Todos ellos, luego, debieron tomar las precauciones del caso, ya sea aislarse o hisoparse.
Más allá de las ironías, Kicillof y Rodríguez Larreta -que suelen mostrar diferencias a la hora de encarar las medidas contra la pandemia- esta vez coincidieron en apoyar las restricciones a la circulación nocturna. El jefe de gobierno se declaró preocupado por la concurrencia de jóvenes a bares y boliches, pero también las aglomeraciones en espacios públicos como plazas. "No impacta todavía en el sistema sanitario, pero los jóvenes contagian", advirtió Larreta, quien se conectó desde su casa, en donde deberá quedarse mientras dure la enfermedad.