El Presidente de la FIFA, Gianni Infantino, insistió el domingo en que "todos son bienvenidos en Qatar", en la presentación de un reloj digital en Doha que inició una cuenta regresiva de un año para el inicio del controvertido Mundial de fútbol de 2022, el primero que se celebrará en Oriente Medio. (https://reut.rs/3czLACE)
El partido inaugural tendrá lugar el próximo 21 de noviembre en el estadio Al Bayt, con capacidad para 60.000 espectadores.
El jefe del organismo rector del fútbol mundial instó a los hinchas LGBTQ y a todos los demás a asistir al torneo y a "participar, hablar y convencer" en los intentos por influir en las políticas del estado árabe.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
"No podemos pensar que si nos quedamos en casa y nos limitamos a criticar las cosas van a cambiar. Las cosas han mejorado. Las cosas seguirán mejorando", afirmó.
El domingo por la noche, estrellas del fútbol como David Beckham y Samuel Eto'o vieron una exhibición de drones desde un embarcadero en la bahía occidental de Doha, mientras los organizadores prometían un torneo "espectacular".
Sin embargo, los responsables de la organización se mostraron a la defensiva en lo que respecta a cuestiones clave que han perseguido al torneo durante años, como las leyes de Qatar contra la comunidad LGBTQ, el bienestar de los trabajadores inmigrantes y las acusaciones de corrupción.
Nasser Al Khater, director general de la Copa Mundial de 2022, defendió al país en una mesa redonda virtual con periodistas el sábado por la noche.
"Qatar ha sido injustamente tratado y examinado, creo, injustamente tratado durante varios años", comentó Al Khater.
Negó las acusaciones del Departamento de Justicia de Estados Unidos de que se habían pagado sobornos para asegurar los votos cuando a Qatar se le concedieron los derechos de organización en 2010.
También defendió los avances del país en materia de derechos humanos, señalando las recientes reformas laborales, pero advirtiendo que aún queda trabajo por hacer.
Amnistía Internacional afirmó recientemente que esas reformas laborales no han mejorado la vida de los trabajadores y que prácticas como la retención de salarios y el cobro a los empleados por cambiar de trabajo siguen siendo habituales. El gobierno de Qatar rechazó las conclusiones de Amnistía.
El viernes, la Organización Internacional del Trabajo dijo que Qatar está investigando e informando de manera insuficiente las muertes de trabajadores en el país.(https://bit.ly/32muvtY)
Con información de Reuters