Caso Báez Sosa: los rugbiers recibieron a sus familiares antes del veredicto

Los ocho acusados por el crimen de Fernando se encuentran en la Unidad 6 de Dolores mientras aguardan por la sentencia. El TOC Nº1 dará a conocer su sentencia el 6 de febrero.

01 de febrero, 2023 | 18.56
Caso Báez Sosa: los rugbiers recibieron a sus familiares antes del veredicto Caso Báez Sosa: los rugbiers recibieron a sus familiares antes del veredicto

Los ocho rugbiers imputados por el asesinato de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell recibieron durante la jornada de este miércoles la visita de sus familiares en la Unidad Nº 6 de Dolores. Los acusados aguardan conocer el veredicto final de la sentencia, a cargo de los jueces que integran el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 1 (María Claudia Castro, Christian Ariel Rabaia y Emiliano Javier Lázzari), el próximo lunes 6 de febrero.

Este miércoles por la tarde, pasadas las 17 hs, sus familias dijeron presente en Dolores donde los acusados se encuentran alojados desde el 1º de enero pasado para mantenerse cerca de los Tribunales en lo que se lleva a cabo el proceso judicial. De todas formas es importante resaltar que no es la primera vez: sus familiares acudieron a dicha unidad durante todos los miércoles del mes pasado.

Los rugbiers se encuentran a la espera de la condena por el delito de "homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas", por el cual tanto la querella como la fiscalía exigen una pena de cadena perpetua. Por su parte, el abogado defensor, Hugo Tomei, planteó -entre varias opciones- la posibilidad de que se los condene por "homicidio en riña".

El próximo lunes 6 de febrero conocerán la sentencia final tras las audiencias, el debate y los alegatos durante la última semana del mes pasado. Los ocho acusados se encontraban, previamente, en prisión preventiva alojados en el penal de Melchor Romero. Todavía no está confirmado si luego de un eventual veredicto condenatorio volverán a ese lugar o si será relocalizados en otro lugar de detención.

Qué penas enfrentan los rugbiers por el crimen de Fernando

Tras la etapa de los alegatos, tanto de la querella, la fiscalía como de la defensa, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 1 de Dolores dará a conocer su veredicto contra los ocho rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa en las puertas del boliche Le Brique, ubicado en Villa Gesell. Cabe recordar que la defensa pidió la absolución mientras que los fiscales y los abogados que representan a la familia del joven asesinado solicitaron la pena de prisión perpetua para los involucrados.

Después de tres semanas intensas, el Tribunal encabezado por la jueza María Claudia Castro deberá decidir qué penas aplica y cómo se computarán los años en los que los rugbiers ya estuvieron en la cárcel. 

"Se los acusa a todos por igual por el delito de homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas en concurso ideal con lesiones”, sostuvo el fiscal Juan Manuel Dávila en la jornada de alegatos.

La querella, a cargo de Fernando Burlando, Facundo y Fabián Améndola, siguió la misma línea de la fiscalía y concluyó que todos los imputados tenían la misma responsabilidad y rol en el asesinato, por lo que merecen la pena de prisión perpetua“Todos participaron, todos pegaron, todos mataron”, aseguró el reconocido y mediático abogado.

Por su parte, el representante legal de los acusados, Hugo Tomeipidió -en el caso de que no se dé la absolución para todos- tres posibles imputaciones y sentencia contra sus clientes. En primer lugar, buscó calificar al hecho como "homicidio en riña o agresión" (agresión sin intención de matar) y también como "homicidio preterintencional" (sí hay intención de provocar lesión pero no la muerte). Ambas prevén penas entre dos y seis años de prisión.

La última opción de Tomei fue calificar al hecho como "homicidio simple con dolo eventual", que quiere decir que los imputados debieron haberse percatado que con las patadas y puñetazos que le dieron a Báez Sosa podrían ocasionarle la muerte, pese a lo cual prosiguieron con su accionar. En este caso, se contempla una pena que va desde los ocho (8) hasta los 25 años de prisión.