Luis Juez, actual senador nacional y presidente del bloque del PRO en la Cámara Alta, es un ferviente defensor de las políticas de ajuste impulsadas por el presidente Javier Milei. Este apoyo no sorprende, pero genera ruido por las contradicciones en la trayectoria del legislador, quien respalda los recortes en el gasto público mientras varios de sus familiares ocupan cargos en el Estado, tanto en el ámbito provincial como nacional.
Juez, quien ha tenido un largo recorrido en la política argentina, se mantiene alineado con el discurso libertario predominante en el actual gobierno. Desde su asiento en el Senado, respaldó medidas que afectan directamente a sectores clave como la educación, la salud y las jubilaciones, áreas objeto de recortes sustanciales bajo las políticas de ajuste.
En paralelo, una decena de familiares cercanos a Juez ocupa cargos en diferentes dependencias estatales. Su hijo, Martín Juez, fue electo concejal de Córdoba luego de trabajar en el Consejo de la Magistratura, un órgano clave del sistema judicial. Según versiones periodísticas, su otra hija, María Agustina, también habría trabajado en el Consejo de la Magistratura. Su hermano mellizo, Daniel Juez, actualmente es legislador provincial en Córdoba y previamente ocupó un cargo en el Ente Regulador de Servicios Públicos (Ersep).
Su hermana Marta, además de ejercer como médica, dirige el área de Salud Pública en la municipalidad de Laboulaye, un sector afectado por los recortes presupuestarios nacionales, apoyados también por Juez. Además, su cuñado Claudio Sucheki trabaja en la AFIP, mientras que otro cuñado, Pedro Alcaraz, es asesor del propio senador en el Senado. Graciela Saieg, también cuñada de Juez, se desempeña como asesora de la senadora Carmen Álvarez Rivero. Finalmente, su hermana Marcela trabaja como docente en Córdoba, profesión afectada por la suspensión del Fondo de Incentivo Docente (FONID) y las restricciones a la paritaria nacional docente.
Las contradicciones de Luis Juez se manifiestan en la Cámara Alta. En diciembre pasado, por caso, el senador reconocía que "el problema de Argentina no está en los sueldos de los diputados y senadores", pero semanas después apoyó el ajuste salarial en el Congreso, impulsado por el presidente Milei, que coloca los sueldos de los legisladores por debajo de la inflación.
El propio recorrido político de Juez confrima su apego al sector público: en los últimos 20 años incluye cargos como intendente y concejal de Córdoba, diputado y senador nacional, y hasta embajador, además de su reciente rol como senador nacional.
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