La familia de Justina Lo Cane escribió un mensaje oficial en su página de Facebook “La campaña de Justina”, tras la triste muerte de su hija, que esperaba hace cuatro meses un corazón.
En la emotiva carta, la familia hizo hincapié que el caso de su hija murió “sabiendo que su lucha le salvo la vida a muchos que esperaban un trasplante” y remarcaron que "por múltiples factores que afectan al sistema de salud argentino nunca llegó la salvación para ella”.
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La niña padecía una cardiopatía que le fue diagnosticada cuando apenas tenía 18 meses de vida. Justina necesitaba un trasplante de manera urgente, pero lamentablemente, el órgano no apareció y falleció la mañana de este miércoles en la Clínica Favaloro.
La carta completa:
No podemos parar de llorar.
Se nos fue el sol.
Se nos fue Justina.
Esperó 4 meses y luchó con todas sus fuerzas para que llegara ese corazón.
Por múltiples factores que afectan al sistema de salud argentino nunca llegó la salvación para ella. Todos los que vivieron una situación igual lo saben. El sistema nunca juega a favor de los pacientes.
Justina solo tenía a su papá, a su mamá, a Cipriano y Ceferino, a sus tíos, a sus abuelos, a su familia, a los amigos de su familia, a sus compañeros del colegio, a sus maestros, a toda la comunidad, a sus médicos y a todos ustedes luchando por salvarle la vida.
Con sus 12 años soportó y resistió, esperando. Quería su fiesta de cumpleaños el 9 de Diciembre. Siempre apostando a salvarle la vida a los demás que estaban en su misma condición.
Justina es un ejemplo, de alguien, que antepuso la necesidad de otros, ante que su vida misma. Justina nunca quiso que pidamos un corazón para ella. Nuestra LEONA quería que nadie pase por lo que ella pasó.
Paola y Ezequiel dieron todo por si hija. Lucharon para intentar salvarla convocando a miles de argentinos en esta campaña que llamamos La Campaña de Justina. En su dolor, les envían un abrazo gigante.
Justina se fue sabiendo que su lucha le salvo la vida a muchos que esperaban un trasplante. No llego su corazon. No lo encontraron.
No podemos parar de llorar. Justina está en el cielo.