Miles de manifestantes marcharon el jueves en Viena para instar a los partidos políticos austriacos, en particular a los conservadores en el poder, a que no formen gobierno con el ultraderechista Partido de la Libertad (FPO), que ganó las elecciones generales por primera vez el domingo.
El FPO quedó en primer lugar con el 29% de los votos, en una victoria histórica para este partido euroescéptico y amigo de Rusia, fundado en la década de 1950 bajo un líder que había sido oficial de las SS y legislador nazi.
Sin embargo, al estar muy lejos de la mayoría absoluta, el FPO tendrá que configurar una coalición para formar gobierno por primera vez.
MÁS INFO
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Sólo el conservador Partido Popular (OVP) ha dejado la puerta abierta a una alianza, aunque no si el líder de la FPO, Herbert Kickl, forma parte del gobierno, algo que la FPO insiste en que haría.
"Queremos decirlo claramente ahora, de forma preventiva: Querido OVP, por favor, no vuelvas a entrar en este pacto", dijo uno de los organizadores de la protesta, Marty Huber, a la cadena de televisión Puls 24, mientras una gran multitud se congregaba frente a la Universidad de Viena ondeando banderas arco iris y pancartas con lemas como "Protejan la democracia".
La marcha debía terminar frente al Parlamento, más adelante en la circunvalación interior de la capital.
Huber se refería al hecho de que el OVP ya ha estado dos veces en el gobierno con el FPO, pero cada vez con éste como socio menor. El OVP quedó segundo en las elecciones del domingo, a unos 2,5 puntos del FPO.
El presidente Alexander Van der Bellen, que supervisa la formación de gobiernos, tiene previsto reunirse el viernes con los líderes de todos los partidos parlamentarios, empezando por Kickl. También les ha dicho que mantengan conversaciones de coalición entre ellos.
El OVP está en condiciones de liderar, ya que tendría una clara mayoría si se aliara con los socialdemócratas, terceros, y un partido más pequeño como el liberal Neos.
Con información de Reuters