Alemania se dispone a endurecer los requisitos de entrada a su territorio, obligando a los viajeros procedentes de cualquier país a dar un resultado negativo en la prueba de coronavirus en un esfuerzo por frenar el rápido aumento de los casos, informó el martes el grupo mediático Funke.
El Ministerio de Sanidad alemán quiere "ampliar los requisitos de pruebas a la entrada lo antes posible", según un documento citado por el grupo de periódicos Funke.
Hasta ahora, sólo los pasajeros aéreos y los que entran procedentes de zonas de alto riesgo tienen que presentar un test de coronavirus negativo, a menos que estén totalmente vacunados o se hayan recuperado de la enfermedad COVID-19 que este provoca.
El ministro de Sanidad alemán, Jens Spahn, quiere que la prueba sea obligatoria en el futuro independientemente del lugar de procedencia de los viajeros y del medio de transporte que utilicen, dijo Funke.
No está claro si los nuevos requisitos se aplicarán también a las personas totalmente vacunadas.
"La coordinación en el Gobierno sobre esto está en marcha", explicó una portavoz del ministerio.
Los casos de COVID-19 han aumentado en la mayor economía de Europa desde principios de julio, debido principalmente a la propagación de la variante delta, más infecciosa.
Con información de Reuters