El Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires registró durante noviembre un incremento de 5,8 por ciento, acumulando en los primeros 11 meses del año una suba de 82,9 por ciento. De acuerdo con el ente estadístico porteño, la trayectoria interanual de la inflación se ubicó en un 89,9 por ciento (5,9 puntos porcentuales por encima del mes previo).
Durante noviembre, la variación del IPCBA respondió fundamentalmente a subas en las divisiones Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, Alimentos y bebidas no alcohólicas, Restaurantes y hoteles, Transporte y Recreación y cultura, que en conjunto explicaron el 76,5 por ciento del alza del Nivel General.
Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles aumentó 12,4 por ciento, al impactar principalmente los aumentos en los gastos comunes por la vivienda. Le siguieron en importancia las subas en los precios de los alquileres, junto con los incrementos en la tarifa residencial del servicio de suministro de agua, de electricidad y de gas natural por red.
Alimentos y bebidas no alcohólicas promedió una suba de 4,2 por ciento. Al interior de la división, los principales impulsos provinieron de pan y cereales (6,2 por ciento), leche, productos lácteos y huevos (4,7 por ciento) y frutas (14,1 por ciento). En sentido contrario, las caídas en verduras, tubérculos y legumbres (-4,1 por ciento), contribuyeron a quitar presión sobre esta división.
Restaurantes y hoteles aumentó 5,9 por ciento, como resultado de las subas en los precios de los alimentos preparados en restaurantes, bares y casas de comida. Transporte registró un alza de 5,7 por ciento, debido a los incrementos en los valores de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar. Le siguieron en importancia la actualización en la tarifa del viaje en taxi (que entró en vigencia el 5 de noviembre) y las subas en los precios de los automóviles.
Recreación y cultura se elevó un 7,1 por ciento., principalmente por los aumentos en los precios de los paquetes turísticos. El resto de las divisiones tuvo una incidencia positiva,
aunque menor al Nivel General.
Durante el mes de noviembre los bienes registraron una suba de 4,4 por ciento, por debajo de los servicios, que aumentaron 6,8 por ciento. La dinámica mensual de los bienes respondió fundamentalmente a los incrementos en los precios de los alimentos (principalmente panificados, lácteos y frutas). En menor medida, se destacaron las subas en los valores de las prendas de vestir, de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar, de los automóviles y de los medicamentos.
El comportamiento de los servicios reflejó principalmente los aumentos en los valores de los gastos comunes de la vivienda, de los restaurantes, bares y casas de comida y de los alquileres.