El Producto Bruto Interno (PBI) es un indicador crucial para medir la riqueza generada por un país, pero cuando se trata de evaluar la calidad de vida de sus ciudadanos, entra en juego el concepto de PBI per cápita. Este indicador, que divide el PBI total de una nación entre su población, busca ofrecer una idea de la relación entre ingresos y habitantes.
Sin embargo, a pesar de su utilidad, el PBI per cápita no está exento de críticas y limitaciones. Te contamos todo lo que tenés que saber para poder analizar sus alcances y sus limitaciones.
¿Qué representa?
El PBI per cápita es un indicador económico que nos muestra cuánta riqueza se crea, en promedio, por persona dentro de un país. También se le conoce como ingreso per cápita o renta per cápita. Su cálculo es aparentemente sencillo: se toma el PBI total de un país y se divide entre el número de habitantes. Este valor se utiliza comúnmente para comparar las condiciones económicas entre diferentes naciones.
MÁS INFO
Asimismo, este tiene distintas limitaciones:
- No refleja la desigualdad: el PBI per cápita trata a todos los ciudadanos por igual, sin tener en cuenta la distribución de la riqueza. Esto significa que un país con altos ingresos per cápita podría tener una gran brecha entre ricos y pobres, lo que no se reflejaría en esta cifra.
- No considera la calidad de vida: el PBI per cápita no tiene en cuenta factores clave como el acceso a la educación, la atención médica, la seguridad social y otros elementos que afectan directamente la calidad de vida de las personas.
- No mide la economía sumergida: las actividades económicas informales o no registradas, como el trabajo en negro, a menudo quedan fuera del alcance del PBI per cápita.
El caso de Argentina: PBI y PBI per cápita
Argentina, una de las economías más grandes de América Latina, ilustra las complejidades asociadas con el PBI per cápita. Aunque el PBI del país asciende a aproximadamente u$s 450 mil millones, las cifras de pobreza son preocupantes. Según el Banco Mundial, la pobreza urbana en Argentina afectó al 42,9% de la población en la segunda mitad de 2020, con un 10,5% de indigencia y una alarmante pobreza infantil del 57,7%.
El cálculo del PBI per cápita de Argentina para 2021 es desafiante debido a la falta de un censo actualizado. El último censo realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) fue en 2010. Las estimaciones se basan en proyecciones a partir de los datos obtenidos en ese censo. Según estas proyecciones, la población estimada de Argentina en 2021 es de aproximadamente 45,8 millones de personas.
El PBI per cápita de Argentina ha estado en declive constante desde 2017, cuando alcanzó los u$s 14.613 por persona. En 2020, según cifras oficiales, se situó en u$s 8.441 por persona.
Si bien las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) inicialmente previeron un crecimiento del PBI de Argentina del 4,9% en 2021, este pronóstico se redujo al 4,5%. Aunque esta cifra es positiva desde el punto de vista macroeconómico, es importante recordar que el PBI per cápita no refleja necesariamente el bienestar de la población en medio de la compleja realidad económica y social del país.