La puja por definir el valor del tipo de cambio no tardará en desatarse nuevamente, en un momento donde se está operando cerca del techo y la oferta privada de dólares continúa débil. ¿Qué pasará con el sector agroexportador? ¿Saldrán a jugar en un mercado que volvió a reestablecer retenciones a la soja y el resto de los granos? ¿La administración Milei deberá regalarles un nuevo dólar soja?
Las incógnitas empezarán a resolverse cuando termine de levantarse la cosecha récord de trigo que le podría dar cierto aire al Poder Ejecutivo hasta febrero y luego sería el turno de los sojeros, actualmente sentados sobre 38 millones de toneladas de granos de la campaña 2025-2026. La nueva licitación para el peaje y dragado de la Vía Navegable Troncal (VNT) podría resultar en un aliciente para los jugadores del sector.
¿Una banda descontrolada?
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El tipo de cambio se mantiene en niveles cautelosos pero amenaza con volver a testear el techo superior. “¿Cuál sería el efecto en el mercado si el BCRA se ve obligado a vender en el techo cuando todavía el Tesoro no cuenta con los recursos para pagar en enero?”, se preguntó la consultora Vectorial, a cargo del economista Eduardo Hecker.
Caputo aseguró que el año que viene se comprarán reservas en la medida en que lo permita la demanda de dinero y la “profundidad del mercado de cambios”. ¿Quién ofrecerá las divisas? “El precio relativo que define si los agentes prefieren vender dólares o desarmar títulos es la tasa de interés contra la devaluación esperada. El comportamiento del mercado hasta ahora parece indicar que este tipo de cambio no es suficiente para remonetizarse vía venta de divisas”, indicaron desde Vectorial.
Dadas así las cosas sobre el tablero económico – político, en el arranque de 2026 se volvería a sentir una puja por el tipo de cambio. El sector agroexportador seguramente querrá una nueva tajada.
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Se abren apuestas por un nuevo dólar soja
Con el inicio de la cosecha del trigo de la campaña 2025-2026 se realizaron operaciones a precio por un total de 1,6 millones de toneladas, el segundo monto más alto de los últimos tres meses.
En base a datos de la Secretaría de Agricultura, la exportación ya compró a precio 4,06 millones de toneladas y otras 379.000 toneladas fueron contratos con precio a fijar. El saldo estimable por volcar al merado sería de 11 millones de toneladas, de un total de 18,5 millones. Un año de cosecha record.
Si se tiene en cuenta que para el mercado interno se necesitan 8 millones de toneladas, este año podrían exportarse cerca de 10 millones de toneladas netas de trigo. El precio FOB para enero ronda los 213 dólares por toneladas. Es decir, podrían ingresar 2130 millones de dólares por la cosecha de trigo. ¿Pedirán una baja de retenciones o un mejor tipo de cambio?
La experiencia de haber recibido un negocio fenomenal con la reducción a cero de las retenciones para la soja por 72 horas podría envalentonar a los actores del sector a recibir un trato semejante que los sojeros. En el fondo, el consorcio exportador de trigo es casi el mismo que el de soja.
En el caso de la oleaginosa, la espalda para negociar es mucho mayor. Los datos oficiales indican que de la campaña 2024-2025 quedarían por vender cerca de 4,9 millones de toneladas y 4,2 millones de la campaña 23-24. “Los datos de la campaña 24/25 denotan un avance en la comercialización de soja para esta altura del año, producto de los programas de reducción de derechos de exportación en el primer semestre del año y de la eliminación transitoria en septiembre pasado”, puede leerse en el informe Monitor Agroindustrial, elaborado para la CIARA CEC, la cámara que reúne a los grandes exportadores.
El grueso del poder de negociación de cara al próximo año radica en una nueva cosecha estimada en las 48.5 millones de toneladas, de las cuales quedarían por vender 38,7 millones de toneladas, el 84% de la campaña.
Según los datos de cotizaciones publicados por la Bolsa de Comercio de Rosario, el valor de la soja para marzo se sitúa alrededor de los 410 dólares por tonelada. Esto implica que los agroexportadores, con su acumulado en silobolsas, disponen de un poder de fuego cercano a los 15.867 millones de dólares, lo que les otorga una posición estratégica para presionar por una reducción de las retenciones o una mejora en el tipo de cambio.
¿Qué programa de beneficios les inventará Caputo para tentarlos a que colaboren con el financiamiento del Tesoro?
La maniobra que todavía investiga la PIA
A los pocos días de concretarse la maniobra de reducción de las retenciones de la soja por un plazo de 72 horas, la Procuración de Investigaciones Administrativas (PIA) recibió una denuncia por administración fraudulenta, abuso de autoridad e incumplimiento a los deberes de funcionario público contra el presidente Javier Milei, el por entonces jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el ministro de Economía, Luis Caputo y el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta.
La denuncia contaba con dos partes diferenciadas. Por un lado, la invocación a la Ley Martínez Raymonda y el posible desfalco hacia los productores por el manejo discrecional de precios de la soja pero también se denunciaron una serie de “desprolijidades” que quedaron en evidencia a partir de la publicación de dos resoluciones de la cartera de Agricultura entre el 23 y 24 de septiembre (una corrigiendo la otra) para terminar de pergeñar –según la denuncia que sigue bajo el análisis de la PIA- la maniobra económica detrás de las retenciones cero.
En la Resolución 184/2025 de la Secretaría de Agricultura se estableció la vigencia por un año de las Declaraciones Juradas por Ventas al Exterior, sin importar que hayan sido hechas con anterioridad al decreto 682/2025 de retenciones 0%. Pero siempre y cuando, el embarque de la mercadería se realizase después del 23 de septiembre.
El 24 de septiembre, Agricultura dictó la Resolución 185 donde elimina del artículo 1 de la resolución 184 la frase “y cuyo inicio de embarque opere con posterioridad al 23 de septiembre de 2025”.
“Con la treta de acumular declaraciones juradas en dos días de lo que habían exportado antes y de lo que exportarán en el futuro, se quedarán con lo que les descuenten a los productores (los verdaderos generadores de la riqueza) en concepto de unos derechos de exportación que nunca pagarán durante todo el resto del año”, puede leerse en el texto de la denuncia ante la PIA cuya resolución debería concretarse en el corto plazo.
