La trilogía de La calle de terror desató la fiebre slasher en Netflix. Las películas ambientadas en 1994 y 1978 desembarcaron hace días en la plataforma y la situada en 1666, el año en el que el pueblo de Shadyside, Ohio, acabó maldito está disponible desde este viernes 16 de julio. Ahora bien, ¿es real esta ciudad o es productor de la aterradora mente de R.L. Stine?
La trilogía de La calle del terror narra la enrevesada historia de Shadyside, un pueblo que vive bajo el maleficio de una hechicera. En los últimos tres siglos, el pueblo vio cómo varios de sus ciudadanos, aparentemente normales, fueron partícipes de brutales matanzas al azar. La leyenda local dice que los asesinatos están relacionados con Sarah Fier, una bruja que fue colgada de un árbol en 1666. Antes de ser ajusticiada, la nigromántica se cortó una mano en un ritual sangriento en el que juró perseguir a aquellos que habitasen esa región hasta que alguien reuniese la extremidad con su cuerpo.
Aunque algunos de los residentes del pueblo se muestran escépticos, al considerar que los asesinos de Shadyside, simplemente, se volvieron locos, otros sí creen que fueron poseídos por Sarah Fier. Las dos primeras películas de La calle del terror siguen a un grupo de adolescentes que intentan descubrir la verdad sobre la maldición y ponerle fin.
En contraste con Shadyside, está Sunnyvale, el pueblo vecino donde nunca parece suceder nada malo. De hecho, hay cierta rivalidad entre los institutos de ambos municipios, pues los estudiantes de Sunnyvale se burlan de la muerte suerte de los jóvenes de Shadyside, sintiéndose impunes, aunque pueden convertirse en víctimas de la maldición si se interponen en los planes de asesinato de uno de los homicidas. Ahora bien, ¿existen Shadyside y Sunnyvale, las ciudades con fortuna opuesta, en Ohio? La respuesta es sí y no y que la que existe no se parece en nada a la de la serie. Primero, sí hay una localidad llamada Shadyside en Ohio. Es una villa situada en el condado de Belmont y que borda el río que da nombra al estado.
A diferencia de lo visto en la película ambientada en 1978, no tiene lago y tampoco tiene un pueblo vecino llamado Sunnyvale. Por otro lado, en Estados Unidos hay varios municipios llamados Sunnyvale, pero ninguno en Ohio. Además, en el Shadyside real, no hay una leyenda urbana sobre una maldición, siendo una población tranquila. Según informó Pop Sugar, ni siquiera las películas se rodaron realmente en Ohio, así que el Shadyside de la trilogía es pura ficción. Las cintas se filmaron principalmente en Atlanta, así como también en zonas de Decatur, Georgia, como East Point y Rutledge.