Sting en Argentina

30 de octubre, 2015 | 12.37

Sting vuelve a la Argentina. Esta aseveración, sencilla y trivial, atraviesa como una flecha incendiaria el corazón de los fans que, a los 64 años de su ídolo, ya empezaban a resignarse a que la estrella británica limitara sus tours a los circuitos más sofisticados de Europa y los Estados Unidos. Lejos quedaba ese romántico e inimaginable 2007, cuando el ex frontman de The Police dejó de ser ex por un ratito y se puso la camiseta argentina para hacer vibrar un estadio River Plate eufórico por el regreso del mítico trío de los ochenta. Y, más lejos aún, aquel memorable recital solista del 87´ donde el Aguijón (no otra cosa significa Sting) todavía llevaba sus rubias mechas al viento (en onda con la Tropicalia de nuestros vecinos brazucas) y nos visitaba acompañado por ese dream team integrado por Dominic Miller, Branford Marsalis y Vinnie Collaiuta, entre otros titanes del jazz fusión. En fin: todos estos recitales entrañables parecían un hermoso sueño perteneciente a otra época del mundo... Pero no. El vertiginoso crepúsculo de este 2015 nos tiene reservadas algunas sorpresas musicales de gran estatura. Y, entre ellas, la que tendrá lugar la noche del próximo domingo 31 de octubre, cuando Sting volverá a tocar para los argentinos, una vez más.

Será una fiesta muy especial, no solo porque se trata de un concierto de una sola noche, si no porque el lugar del encuentro será el DirecTV Arena, un flamante estadio cerrado con capacidad para 15.000 personas que estará celebrando su inauguración. El equipo que trabajará en las luces y el sonido es el mismo que armó los shows de mayor prestigio internacional de Roger Waters. Se esperan invitados sorpresas y una despedida bien bien tardera. Aunque ya quedan pocas, las entradas continúan a la venta, pero el que haya sido pillado distraído también puede hacerse un rastrillaje por las redes sociales que alguna última chance encontrará. En cuanto a nosotros, para celebrar el acontecimiento hemos decidido seleccionar tres de los mejores temas de la etapa solista de Sting, quizás la menos conocida por el público general, y reseñarlos brevemente. ¿Se nota mucho que es una mera excusa para escucharlos una vez más?

I´m so hapy that I can´t stop crying

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https://www.youtube.com/watch?v=EJqQjMpgNcA

Canción liviana y placentera, de inspiración country y alma pop, esta sobria confesión de un divorciado que encuentra la felicidad después de un duro duelo por su matrimonio es interpretada por el Aguijón con una versatilidad vocal y una emoción que hacen gala de su talento. El británico siempre supo combinar su virtuosismo musical con letras simples, consistentes y que ofrecen su pulpa al final de un verso corto o a la vuelta de un estribillo, en pequeños momentos de revelación, como sucede al final de este tema. La versión que presentamos, además, cuenta con el bonus de ser cantada a dúo entre Sting y un fan (ya famoso por esta encantadora performance) que ha sido invitado a subir al escenario, y que a decir verdad se la banca bastante bien.

Desert Rose

https://www.youtube.com/watch?v=3gzqsmx1KGU

Hitazo que entrelaza tradición hindú con música electrónica, dueño de uno de los mejores comienzos de canción de Sting, de esos bien peliculeros, como todos los de su saga de canciones arábigas (la más conocida, "Mad about you", con su irresistible riff épico, casablanquero, del comienzo), este tema volvió a poner al Rubio Albino en el centro de los rankings mundiales en pleno año 2000. El impresionante arreglo hace que ramificaciones de la misma melodía básica puedan perpetuarse en el tiempo con intensidad variables pero siempre altas, llevándonos desde el inicio donde todo el protagonismo lo tiene el cantante algeriano Cheb Mami con sus magníficos contoneos hasta un final donde el in crescendo armónico se lleva todos las barreras por delante para finalmente disiparse en el mismo polvo del que salió. Podríamos haber elegido la versión en vivo del Concierto de Berlín, pero estamos convencidos de que, en este caso, no hay como la original.

Seven Days

https://www.youtube.com/watch?v=EV0rJ6rvWbw

Acaso el tema preferido de los porteños, quizás por ser el relato en clave cómica de un neurótico en problemas con su pareja por la intervención de un tercero. Los músicos de profesión lo adoran, quizás por ser un tema muy pegadizo y al mismo tiempo tener un compás irregular (5/4), como "Money" de Pink Floyd. Las mujeres, por alguna razón, mueren con esta humorada luminosa mucho más que los hombres. En todo caso, nadie puede decir que no sea un gran tema, una composición original y atractiva, cálida y fresca, de impecable ejecución técnica, sentida interpretación y profunda belleza. El video muestra la toma maestra de la canción, grabada en uno de esos castillos en los que le gusta recluirse al Aguijón con sus muchachos para sacar en unos pocos días las tomas definitivas de sus discos. El clima visual se conjuga con el musical para lograr una experiencia plena, redondita. Todo muy estilo eremita sabio, con un toque oriental y el ambiente cargado del polen irónico de los campus universitarios londinenses. En los últimos días se ha difundido la track list del concierto del domingo, que es una de la nuevas formas de spoiler. Temeroso de dejarme tentar, solo alcancé a saber que este tema está incluido.