El presidente Mauricio Macri y su par de Brasil, Jair Bolsonaro afirmaron que continuarán con las presiones contra Venezuela, país que consideran una "dictadura". Sin comunicar ningún acuerdo bilateral concreto, los jefes de Estado afirmaron que Nicolás Maduro se perpetúa en el poder por medio de elecciones fraudulentas.
El Jefe de Estado argentino dijo que “compartimos la preocupación por los venezolanos y reafirmamos nuestra condena a la dictadura de Nicolás Maduro”.
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“No aceptamos esta burla a la democracia, y menos el intento de victimización de quien es en realidad el victimario”, remarcó.
Dijo que la comunidad internacional “ya se dio cuenta” de que “Maduro es un dictador que busca perpetuarse en el poder con elecciones ficticias, encarcelando opositores y llevando a los venezolanos a una situación desesperante y agónica”.
A su turno, Bolsonaro afirmó que Brasil y Argentina tiene una convergencia de valores en la defensa de la "libertad" con "Venezuela como ejemplo".
Macri y Bolsonaro sólo firmaron un tratado de extradición durante una reunión mantenida en Brasilia por ambos jefes de Estado, aunque no detallaron cuáles serán las medidas a adoptar.