Uno de los pilares de la campaña electoral de Cambiemos está totalmente caído: la obra pública. El desembolso del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por U$S 900 millones para el fideicomiso destinado a financiar la construcción y mejora de seis corredores viales sigue sin aparecer.
A raíz de esta situación, el Gobierno ya se habría contactado con las empresas ganadoras de los proyectos la posibilidad de postergar un año el avance de los trabajos principales.
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Según indicó el portal BAE Negocios, el Banco Itaú se salió del préstamo que iba a formar parte del giro del BID, al tiempo que el JP Morgan, el Morgan Stanley y el Citibank seguir los mismos pasos. El contexto social y económico implica grandes riesgos para quienes apuesten por los contratos de Participación Público Privada (PPP).
En los últimos días, funcionarios del Gobierno habrían dialogado con representantes de las constructoras a cargo de los PPP. El Ejecutivo planteó que el alcance que tenían que ejecutar a julio de 2019 se pasaría a julio del año que viene.