"Como de vez en cuando, cuando tengo suerte. Fui a la heladera social y me salvo el día. Creo en Dios, voy a la iglesia evangelista. Tengo 21 años y prefiero pedir antes que hacer daño, veo gente de mi edad que sale a robar y doy gracias a Dios no estar en esa situación", aseguró el joven a declaraciones realizadas a Radio 90.1.
El índice de desempleo de la ciudad de Salta es uno de los más altos del país, habiendo alcanzado durante 2015 un 8,4%, sólo por debajo de los partidos del Gran Buenos Aires, de Rosario, de Mar del Plata y de Río Cuarto.