Erupción de volcán islandés se ralentiza, pero obliga a evacuar balneario

Un volcán situado en el suroeste de Islandia expulsó lava y humo por segundo día consecutivo el viernes, informó la oficina meteorológica del país, después de que la erupción obligó a evacuar un balneario de lujo cercano.

Tras la erupción del jueves en la península de Reykjanes, se podían ver fuentes de roca fundida brillando en el cielo nocturno, pero el flujo del volcán se ha ralentizado desde entonces, dijo Rikke Pedersen, jefe del Centro Volcanológico Nórdico.

"Este es el comienzo típico de una erupción", dijo. "Tenemos un chorro bastante intenso y una gran producción al principio y rápidamente disminuye, pero eso no nos dice nada sobre cuánto durará".

Al principio, la lava salía a un ritmo de hasta 2.000 metros cúbicos por segundo, pero el ritmo actual, más lento, es comparable al de la última erupción de mayo, señaló. La fisura en el volcán, que ha entrado en erupción seis veces desde diciembre, se amplió hasta 5 kilómetros durante el día desde los 3,9 kms a última hora del jueves, añadió.

El cercano balneario de lujo Blue Lagoon, una importante atracción turística con grandes piscinas al aire libre calentadas por energía geotérmica, fue evacuado a última hora del jueves y permanecía cerrado el viernes, informó el complejo en un comunicado. Unos 1.300 clientes y empleados se encontraban en el balneario, informó el diario islandés Morgunbladid.

La oficina meteorológica advirtió de que la contaminación por gases de la erupción podría ser arrastrada por el viento hacia el sur y el sureste.

La cercana ciudad pesquera de Grindavik, amenazada por la lava y afectada por terremotos en algunas erupciones previas, no se vio directamente afectada, según la oficina, y Pedersen dijo que los flujos de lava se habían detenido cerca de una carretera cercana.

El tráfico aéreo de entrada y salida del aeropuerto de Keflavik no se vio afectado, según informó la oficina en su página web el viernes.

(Editado en español por Carlos Serrano)