Desde hace unos años, el “Mundo Boca” decidió festejar el día del hincha. La autocelebración del culto por Boca tuvo inicio, desde ya, el 12 de diciembre de 2012. El “jugador número 12” del equipo tiene una mística actual, pero tuvo un inicio que tiene casi cien años.
En el siglo pasado, durante la década del '20, Boca tuvo una gira por Europa y por algunos países de Sudamérica. En 1925 principalmente, el plantel xeneize viajó a España, Alemania y Francia. Allí, durante tres meses, disputó una gira y fue la primera excursión de un equipo argentino en el exterior. En esta travesía no hubo solo jugadores y dirigentes, hubo una persona especial: Victoriano Caffarena.
Descendientes de genoveses (xeneizes), Victoriano Caffarena acompañó al plantel en aquella excursión por Europa. Masajista, utilero y hasta aportó dinero para poder sumarse al equipo y seguir de cerca lo que pasaba con el club de sus amores. Incluso, hasta consiguió un carnet de periodista para poder ingresar a los estadios. Para viajar -y costear el viaje de algunos futbolistas- “Toto” Caffarena vendió una propiedad y, si bien tenía dinero, no le alcanzaba para poder sumarse a la travesía.
El viaje en barco duró 22 días y allí arriba Caffarena hizo de todo. Incluso, hasta envió algunas crónicas para pagar ese carnet de periodista. Algunas cosas se publicaron en El Telégrafo. Boca jugó en Europa 19 partidos. Ganaron 15, empataron uno y perdieron tres. Entre las victorias están: el Real Madrid, la Selección de Catalunya y Osasuna. Perdieron ante el Athletic y el Celta.
Más allá de los resultados deportivos, hubo algo que cambió para siempre. Antonio Cerrotti, uno de los jugadores de aquel Boca que se fue por Europa, lo empezó a nombrar como “el jugador número 12”. Justamente por todo lo que hacía para el club. Desde allí la afinidad de Caffarena para con el resto del equipo creció aun más.
Varios años después, en 1955, en honor a los 30 años de esa travesía, Victoriano Caffarena recibió una condecoración por parte del club. El entonces presidente de Boca, finalmente, lo denominó oficialmente el “jugador número 12”. Desde ahí en adelante, la hinchada adoptó ese nombre para el constante apoyo.