El ministro de Economía, Axel Kicillof; y el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, desalentaron hoy las intenciones de al menos un gremio que anticipó que pedirá subas de "por lo menos el 50 por ciento de aumento salarial" en las próximas paritarias.
"Recuerdo enero del año pasado que también estaban armando un escenario de aumentos salariales de 60 por ciento, pero después cuando las paritarias empezaron a aparecer se fijaron como se fijan en las economías como las nuestras, economías muy dinámicas", respondió el jefe del Palacio de Hacienda.
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Al ser consultado sobre lo declarado por el jefe de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, que adelantó que en las paritarias de 2015 "todos" tendrán "que pedir por lo menos un 50 por ciento de aumento", Kicillof sostuvo que "los salarios no pueden subir 20 por ciento más que los precios que cobran las empresas donde la gente trabaja porque sino se fundirían todas las empresas".
Por su parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, calificó como "desmesurada y exagerada" la propuesta de la UTA y dijo: "Vamos a estar atentos a un proceso de negociación el año que viene que haremos con el entendimiento de siempre" pero aclaró: "Pensar en una cifra como la que planteó Roberto Fernández es absolutamente exagerado".
En declaraciones a radio Continental, el funcionario resaltó que "el Gobierno nunca ha fijado techo en la paritaria privada y la paritaria estatal siempre se encuentra bastante en línea con la paritaria privada".
"Lo que el Gobierno siempre ha propuesto es que los salarios en la Argentina, en términos reales, crezcan", dijo Kicillof, quien aclaró que "buena parte de las decisiones salariales las toma el sector privado".