Por Mariano Torres Negri
Redacción El Destape
Fuera de campo cine
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
La carrera de Relatos Salvajes parece por el momento no tener un final pero, de tenerlo, no cabe duda que sería uno muy feliz. Mientras que en la Argentina ya pasó los cuatro millones de espectadores (es, ahora sí, la película nacional más taquillera de la historia habiendo recientemente superado a Nazareno Cruz y el Lobo), en Francia acaba de estrenarse con enorme éxito de taquilla. Los números se agigantan y las buenas críticas no disminuyen pero, claro, todos los ojos no están puestos en estos datos a esta altura redundantes, sino en la entrega de los Premios Oscars de este domingo. La inclusión de la película de Szifrón se trata de la sexta nominación al máximo premio de La Academia De Arte Cinematográfico de una película Argentina, y la tercera nada más que en los últimos quince años (las otras dos, El Hijo de la Novia y El Secreto de Sus Ojos, le habían pertenecido a Juan José Campanella).
El enamoramiento de Hollywood para con nuestro cine queda así más que confirmado, pese a que los rumores no ayudan y las mesas de apuestas no favorecen a la película Argentina. Delante de la obra de Szifrón se encuentran la polaca Ida, acaso la gran favorita, y la rusa Leviathan. Sin embargo, vale recordar que estamos ante la categoría más impredescible de la noche, y en un año donde se pronostican sorpresas múltiples, conviene no perder la esperanza. Después de todo, el antecedente favorece a la Argentina: El Secreto de Sus Ojos tampoco era la preferida de la ceremonia allá por el año 2010.
Pero la presencia argentina en los premios 2015 no se limita a la obra de Damián Szifron: Birdman, para muchos la gran favorita a "Mejor Película" (está cabeza a cabeza con Boyhood, esa épica independiente de Richard Linklater), se encuentra nominada también a "Mejor Guión" y allí nos representan dos compatriotas: Armando Bo y Nicolás Giacobone. Gracias a una cosecha significativa en los premios otorgados por los distintos artífices de la industria del cine (actores, productores, directores), la película de Alejandro González Iñárritu se perfila como la posible ganadora de la noche y, aunque de manera indirecta, eso representaría en parte también un triunfo para el talento cinematográfico argentino.