Además, Martínez insistió que la administración de Mauricio Macri "no" quiere Fuerzas Armadas "al servicio de un gobierno o de un proyecto político, sino al servicio del Estado y de la democracia".
De esta manera, el jefe de la cartera castrense ratificó la decisión de tener instituciones militares caracterizadas por el "profesionalismo", dejando atrás la iniciativa del polémico ex jefe del Ejército César Milani, quien durante el kirchnerismo adscribió a la fuerza al "proyecto nacional".
"Se revisará todo, no específicamente lo que le tocó a Milani. Hay áreas sensibles en las que se están haciendo auditorías", señaló Martínez durante una entrevista publicada hoy en el diario La Nación.
"Se revisará todo, no específicamente lo que le tocó a Milani. Hay áreas sensibles en las que se están haciendo auditorías", señaló Martínez durante una entrevista publicada hoy en el diario La Nación.
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Al ser consultado sobre qué avances tienen esas auditorías, el funcionario respondió: "Se está avanzando en áreas de Fabricaciones Militares, de Tandanor, en algunos arsenales".
Por caso, Fabricaciones Militares estuvo dirigida por Santiago Rodríguez, un hombre de la agrupación kirchnerista La Cámpora.
Respecto a cómo impactará en los organismos castrenses la declaración de la emergencia en seguridad, Martínez explicó: "Si bien debe interceptar vuelos irregulares, principalmente en la zona del Escudo Norte, la Fuerza Aérea es un eslabón más en esta cadena y no el más determinante".
"Está comprobado que el grueso del narcotráfico entra por tierra y por vías navegables. Podemos tomar medidas para controlar el avance de la droga y vamos a trabajar para eso. Pero estos operativos están en manos de las Fuerzas de Seguridad", indicó.
De inmediato agregó: "No hay ley de derribo. Lo que habrá es una protección del espacio aéreo, terrestre y fluvial. La Fuerza Aérea hará el control del espacio aéreo que le corresponde por la Constitución. Son medidas disuasivas para permitir que los vuelos clandestinos puedan ser reconducidos e intimados a aterrizar para que las fuerzas de seguridad puedan hacer controles".
También, recalcó que en su gestión "la prioridad es cubrir la frontera norte" con unidades militares, para luego avanzar en "otro grado de equipamiento, comos los aviones supersónicos", ya que la Argentina se quedó sin ese sistema de arma de defensa aérea tras el retiro de las aeronaves Mirage.