China está dispuesta a crear junto a la comunidad internacional las condiciones para la paz entre Israel y Palestina, afirmó hoy su enviado especial para Medio Oriente, Zhai Jun, en medio de la escalada en Medio Oriente.
"China espera sinceramente que Israel y Palestina puedan coexistir pacíficamente, y está dispuesta a trabajar con la comunidad internacional para promover las negociaciones de paz y crear las condiciones para la paz", dijo el diplomático, citado por la Cancillería en su página web.
Aseguró que Beijing no tiene intereses personales en este conflicto y que siempre está del lado de la paz, la justicia y la imparcialidad.
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"China condena las acciones que dañan a civiles inocentes y pide un pronto alto el fuego y el cese de la violencia, así como la reanudación de las conversaciones de paz basadas en el plan 'Dos Estados para dos pueblos' para aumentar la confianza en que se alcance la paz para ambos pueblos", subrayó Zhai Jun, citado por la agencia de noticias Sputnik.
Al respecto, el diplomático mantuvo hoy una conversación telefónica con Rafael Harpaz, jefe adjunto del departamento para la región de Asia-Pacífico del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí.
El sábado pasado, el movimiento palestino Hamas lanzó miles de cohetes desde la Franja de Gaza en un ataque sin precedentes e infiltró decenas de milicianos en las zonas fronterizas del sur de Israel, tras lo cual el primer ministro isarelí, Benjamin Netanyahu, declaró que el país "está en guerra".
En respuesta, el Ejército israelí puso en marcha la operación "Espadas de Hierro", movilizó a 300.000 reservistas, lanzó varias oleadas de ataques aéreos sobre Gaza y está preparando una ofensiva terrestre.
El lunes, Israel impuso un bloqueo total a la Franja, cortando los suministros de electricidad, combustible, alimentos y agua.
Según los últimos datos disponibles, la escalada de violencia causó más de 1.300 muertos y más de 3.300 heridos en Israel, a los que se suman más de 1.400 fallecidos y más de 6.200 heridos en Gaza.
A la vez, entre 100 y 150 personas, tanto militares como civiles, fueron secuestradas durante el ataque en territorio israelí y retenidas como rehenes en el enclave palestino.
Con información de Télam
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