Hasta ahora no se ha detectado "ninguna señal de actividades nucleares no declaradas" durante las inspecciones que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) hizo en Ucrania por denuncias de Rusia, aseguró el organismo de control nuclear de la ONU que preside el argentino Rafael Grossi.
"Nuestra evaluación técnica y científica de los resultados que tenemos hasta ahora no ha mostrado ninguna señal de actividades no declaradas ni de materiales (sospechosos) en estos tres lugares", declaró el organismo en un comunicado.
"Informaremos de los resultados de las muestreos ambientales tan pronto como sea posible", agregó Grossi.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Los tres lugares inspeccionados son el Instituto de Investigaciones Nucleares de Kiev, una planta de procesamiento de minerales en Zhovti Vody y de una planta de fabricación de maquinarias en Dnipro, reprodujo AFP.
"En los últimos días, los inspectores han podido llevar a cabo todas las actividades que el OIEA había programado y tuvieron libre acceso a los lugares", apuntó el comunicado.
Estas inspecciones se producen a instancias del gobierno ucraniano, después de que Rusia la acusara de planear la utilización de un arma con carga radiactiva o biológica que le diera luego a Moscú el pretexto para llevar adelante un ataque con armas nucleares.
En tanto, las autoridades de la provincia de Zaporiyia, que se incorporó a Rusia a fines de septiembre pasado, acusaron a Ucrania de haber colocado explosivos en el territorio de la mayor planta nuclear de Europa.
"En la central nuclear de Zaporiyia se ha frustrado un ataque terrorista, detrás del cual está el régimen de (Volodimir) Zelenski", dijo a la agencia Sputnik un portavoz del gobierno local prorruso, Vladimir Rogov.
El funcionario precisó que en el recinto de la planta fue hallado un escondite con explosivos que las tropas ucranianas habrían dejado en febrero o marzo pasado. El servicio de seguridad ucraniano, según Rogov, iba a reclutar a uno de los empleados de la central para detonar esa carga.
Desde hace meses, Rusia y Ucrania se acusan mutuamente de bombardear las instalaciones de la central.
Los empleados de la planta, operada hasta entonces por la empresa ucraniana Energoatom, serán contratados por una entidad rusa.
Energoatom denunció este jueves que la central nuclear sufrió un apagón a causa de un corte de suministro de energía tras un ataque con artillería por parte de las tropas de Rusia.
"La central nuclear de Zaporiyia se encuentra totalmente sin energía a causa de un ataque con artillería de los racistas", en referencia a los rusos, dijo Energoatom en un mensaje en su cuenta en Telegram, citado por Europa Press.
Detalló que el ataque fue ejecutado ayer y apuntó que habría causado daños en dos líneas de alto voltaje, lo que provocó la entrada en actividad de 20 generadores.
Con información de Télam