Francia debe intensificar de forma urgente las medidas de seguridad en sus estadios de fútbol, dijo el martes el ministro del Interior del país, Gerald Darmanin, tras una reunión con la ministra de Deportes, Roxana Maracineanu, después del último brote de violencia de los aficionados.
Darmanin dijo que las autoridades francesas examinarán temas como imponer prohibiciones a los aficionados y los estadios, tener más cámaras de vigilancia en los lugares y aclarar quién tendría la autoridad para suspender los partidos en caso de violencia en las gradas.
La reunión se celebró después de que el partido del domingo entre el Olympique Lyonnais y el Olympique de Marsella fue suspendido por los actos de violencia de la multitud.
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La comisión disciplinaria de la Liga Francesa (LFP) dijo el lunes que el Lyon jugará sus partidos en casa de la Ligue 1 a puerta cerrada hasta que se pronuncie sobre el incidente el 8 de diciembre, después de una investigación.
"Necesitamos llegar a conclusiones para asegurarnos de que podemos evitar que esas cosas vuelvan a suceder, para que el fútbol siga siendo un evento popular", dijo Darmanin a los periodistas.
Con información de Reuters