Una de las principales consecuencias económicas tras haberse declarado la pandemia fue revalorizar los servicios excluyentes que abastecen de necesidades básicas en una sociedad y categorizar a los trabajadores que los llevan adelante como esenciales. Sin embargo, como tales, están mayormente expuestos a contraer Covid-19 por su contacto permanente con otras personas y su presencia física en lugares comunes. El problema es que no siempre las empresas dimensionan esto y no en ocasiones no hay un correlato con las medidas de cuidado preventivas.
Es así que, cuando no hay una respuesta oficial, hay una reacción automática de los empleados. Por eso, distintos delegados de varias cadenas como Walmart, Carrefour, Vital y se le suma la empresa de transporte de caudales Brinks, conformaron la Agrupación La Voz de Comercio, organización que denuncia que ya hay alrededor de 2350 trabajadores contagiados de Covid-19 en supermercados del AMBA. “La cifra es el resultado de registrar la información oficial junto con los datos que nosotros mismos recabamos”, contó Mario Amado, representante de la agrupación y delegado en Carrefour. Desde el twitter de La Voz de Comercio (@lavozdecomercio) emiten comunicados diarios para difundir cada vez que se registra un nuevo caso positivo en algún supermercado en el cual, principalmente, aclaran la sucursal del trabajador y su ubicación. “Carrefour, por ejemplo, comparte comunicaciones internas para informar la cantidad de casos, pero no especifica cuales son las tiendas donde hubo contagiados, entonces nosotros lo aclaramos para que sepan que, si van a una sucursal, ahí hubo positivos" explicó Amado.
De los 2350 casos, el 77% se concentran en Carrefour y Coto con 1015 y 800 casos respectivamente, dando un total de 1815 contagiado solo en estas dos cadenas.
La situación crítica de ambas firmas no toma por sorpresa a los trabajadores, puesto que hace meses que se ha denunciado el incremento de casos en sus sucursales y la falta de acción por parte de las autoridades. Cuando a fines de mayo el brote de Covid-19 en supermercados y mayoristas inició con 78 contagiados, Amado denunció que el Secretario General de Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios,(FAECYS), Armando Cavalieri, “salió a decir que no eran muchos” y ahora, que se cruzó la barrera de los 2000, ”siguen sin pronunciarse formalmente”. Contar los casos con los dedos de la mano subestimó el problema y la red de contagios se fue expandiendo. Más tarde, para el 9 de junio, desde Trabajadores de Supermercados, (@trabdesuper) cuenta que lleva adelante una recopilación diaria de estos datos y los da a conocer al instante, registró 196 casos en todos los supermercados y mayoristas. Además, en aquel entonces la web Gestión Sindical recibió reclamos que redundaban en la falta de respeto a los protocolos y presiones y amenazas a los empleados para no difundir los contagios a través de redes sociales.
Desagregado por comercio, ya Coto lideraba el ranking con 81 casos concentrados en Quilmes y Barrio Norte y detrás le seguía Carrefour, con 57 positivos particularmente en Recoleta y Palermo. En el tercer puesto estaba Disco, perteneciente a la cadena Cencosud, con tres contagiados. “Al principio de la pandemia no todas las empresas tuvieron la misma rapidez para implementar las medidas de seguridad e higiene y, según la presión gremial que había, demoraban más o menos en decidir”, recordó Amado. Dos semanas después, el 24 de junio el Observatorio de Trabajadores, llevado adelante por Prensa Obrera, confirmó 444 contagios en todo el AMBA, donde Coto nuevamente estaba a la cabeza con 158 empleados enfermos y la firma francesa, Carrefour, continuaba segunda con 129 y Cencosud, que integra Disco, Vea y Jumbo, con 70. “El conteo podría ser mayor debido a que muchos casos aún están a la espera de su confirmación y a que, tanto las patronales como la dirección del Sindicato de Comercio, no difunden los casos” denunciaron desde el Observatorio. Si de casos se habla, los relatos de trabajadores de la empresa de Alfredo Coto merecen un capítulo aparte.
"Desde el inicio de la pandemia que vinimos denunciando que Coto no activa el protocolo. La respuesta de la empresa hacia mí, fue una golpiza de su agrupación sindical. Somos una clase de esclavos del siglo XXI, no podemos expresarnos libremente en nuestro lugar de trabajo, nos hacen ciberpatrullaje, nos despiden injustificadamente y nos aprietan. El mal manejo de los protocolos tocó fondo y se cobró vidas. Estamos esperando la respuesta de los abogados para seguir avanzando en este atropello. Si te contara, no creerías lo que estamos pasando los trabajadores", describió Hector Castro, empleado de la firma.
Casi un mes después, el 13 de julio, La Izquierda Diario publicó su propio relevamiento, en base a las denuncias recibidas por el diario de trabajadores nucleados en organizaciones y relevamientos semanales, y contabilizó 900 casos de Covid-19 distribuidos entre 265 establecimientos relevados en el AMBA. Del total, 768 se concentraron en las principales marcas: en Coto, la marca del empresario argentino Alfredo Coto, registraron 427, Cencosud 211 y Carrefour 130. Según el informe del medio, en el 30% de los establecimientos “realizaron protestas y /o medidas de fuerza como respuesta a esta situación” y se confirmaron “72 conflictos laborales motivados por el persistente incumplimiento del protocolo ante casos de COVID-19 sospechosos, así como por condiciones necesarias de salubridad e higiene”. De 73 a 2350 contagios, en tres meses y medio. Hasta el cierre de esta nota, el Destape intentó comunicarse con el sector de prensa de ambas cadenas pero no recibió respuestas.
Dadas las circunstancias, desde la Agrupación La Voz de Comercio se reclama la implementación de un protocolo “único y de uso obligatorio para todas las cadenas por igual” porque, explicó el delegado de Carrefour, el protocolo actual “no contempla las necesidades de los supermercados” ¿Cuáles serían las modificaciones en un nuevo plan de medidas adaptadas a estos establecimientos? Consultado por este medio, Amado respondió: “Debería contener, por ejemplo, una sola definición de contacto estrecho en un supermercado, porque no es lo mismo la cercanía en todos los locales y formatos. Un hipermercado, un super y un express tienen diferentes dimensiones y la distancia entre un trabajador y el cliente no es la misma. Todo se podría haber hecho mejor si se hubiera hablado con los empleados”. Sobre si hubo una intervención de FAECYS, una fuente que prefiere resguardar su nombre dijo: “La Federación aduce que habló con las empresas y firmó un protocolo, pero es mentira, hace 40 años no pisan un supermercado” Hasta el cierre de la nota El Destape intentó reiteradamente comunicarse con FAECYS pero no hubo respuesta.
De todos modos, Amado reconoció que actualmente, las medidas de cuidado en supermercados como Carrefour lograron mejorarse gracias a la presión gremial y hay una mejor implementación del distanciamiento en lugares como el comedor o el vestuario, la toma de temperatura en la entrada, y se respeta el aislamiento en caso de ser positivo o contacto estrecho. “No quiero decir que no se hace nada, pero tampoco se hace todo”, dijo el delegado de la firma francesa y explicó que Carrefour intenta establecer la modalidad de teletrabajo en algunas tareas, pero sin respetar cuestiones articuladas en la Ley de Teletrabajo como el derecho a la desconexión, cuidado de los datos privados y pago del uso de internet por cuestiones laborales.
La problemática llegó hasta el intendente oficialista de Hurlingham, Juan Zabaleta, quien se reunió con Amado el 14 de septiembre para expresarle la situación. "No nos reunimos con él por su calidad de Intendente sino por ser un referente en el armado político nacional. Esperamos que sirva de puente para que esto llegue a las autoridades", finalizó el delegado de Carrefour.
Denuncias desestimadas
El pasado 10 de abril se radicó una denuncia en la Fiscalía PCyF nº 8 contra las sucursales 91, ubicada en Agüero 616, y 46, encontrada Av. Rivadavia 2846, para llevar adelante una investigación por posibles incumplimientos del protocolo sanitario para prevenir la expansión del contagio por Coronavirus. De la medida surgió que el fiscal Maximiliano Vence respondió que la Dirección General de Protección del Trabajo, a cargo de José Fernando Cohen, se había encargado de chequear el funcionamiento de la sucursal 46 el 8 de junio y la sucursal 91 el día 11 de junio y encontró en ambas una correcta implementación de las medidas preventivas. El inspector aseguró también que los protocolos ya se habían revisado el 13 de mayo pasado.
De esta manera, el fiscal dio por finalizada la investigación y solicitó el archivo de la denuncia por falta de pruebas.