Trabajadores de los hospitales públicos de la Ciudad de Buenos Aires advirtieron sobre el incremento de la demanda en las Unidades Febriles de Urgencia (UFU) que funcionan en 18 centros de salud porteños para realizar controles contra el coronavirus e hisopados, y enfatizaron la necesidad de que se refuercen esos servicios con más personal y recursos.
Jorge Gilardi, presidente de la Asociación de Médicos Municipales afirmó, en diálogo con Télam, que "se registra un marcado crecimiento de la demanda en las UFU, casi el doble de las consultas que llegaban un tiempo atrás; muchos son pacientes con síntomas de Covid-19 y otros son cuadros febriles que no son coronavirus, pero que concurren de manera preventiva".
"Lo que estamos pidiendo es que se refuercen las UFU con más personal para poder afrontar el incremento de la demanda; si hacemos las cosas bien no tendríamos que preocuparnos por un posible colapso del servicio, para eso hay que tomar todos los cuidados sanitarios, revisar la organización del trabajo y mejorar las condiciones laborales y salariales de los profesionales que lo llevan adelante", apuntó.
Gilardi sostuvo que "es muy importante que la ciudadanía tome con responsabilidad todos los cuidados para prevenir contagios frente a la segunda ola que ya tenemos encima. Aunque quizás alguna persona vea imágenes de las filas en los hospitales y tema acercarse, nunca hay que desalentar al paciente. Es el Estado el que debe garantizar las condiciones de sanidad, y las UFU suelen estar aisladas. Hay que entender que siempre es peor no acercarse a la consulta".
"En el sistema de salud pública porteño los profesionales vacunados superamos el 80%, pero las autoridades hicieron un planteo de que a quienes todavía no recibieron la segunda dosis en el plazo de 21 días, que es lo que corresponde, se la van a dar a los tres meses; tenemos un compromiso oral de que van a rectificar esa decisión pero queremos ver que se haga realidad", agregó.
El dirigente sindical subrayó que "de los 12.500 profesionales que tenemos afiliados en la Asociación, hay unos 8.000 que están en la primera línea de servicio frente a la pandemia y de ellos unos 1.400 que padecieron Covid-19 durante 2020. Algunos fallecieron y otros sufrieron cuadros graves; los trabajadores de la Salud seguimos con el compromiso de siempre, pero sentimos que no recibimos de las autoridades todos los cuidados necesarios frente a la pandemia".
"El incremento de la demanda en las UFU es un síntoma de lo que tenemos enfrente, hay que revisar la manera en la que se organiza el trabajo, y es necesario que las autoridades no cambien las órdenes todo el tiempo, que revisen las exigencias desmedidas que a veces se plantean, la gestión de las licencias que para algunos compañeros son necesarias y también la cuestión salarial", completó Gilardi.
El secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en el hospital Durand, Héctor Ortiz, afirmó -en diálogo con Télam- que "el escenario que se vio en las imágenes que circularon hoy de las filas en las UFU de los hospitales porteños es el mismo de toda esta semana porque se viene acrecentando la cantidad de gente que se acerca con síntomas a realizarse hisopados".
"La demanda no sólo crece en las UFU, también vemos cómo aumenta la cantidad de pacientes internados mientras que seguimos reclamando por la falta de personal de enfermería y en otras especialidades médicas", añadió.
Ortiz enfatizó que "en el sistema de salud pública porteño sigue faltando vacunar a una parte del personal esencial. En el hospital Durand los vacunados son poco más de la mitad, y a eso se suma otro desastre que es que nos mandan de un lugar a otro en lugar a vacunarnos en lugar de que todos lo podamos hacer en el hospital en el que trabajamos".