Ante el aumento de los contagios diarios por la llegada de la segunda ola de coronavirus en la Argentina, los dirigentes de Juntos por el Cambio comenzaron a deslizar que no quieren restricciones severas para evitar el contacto social.
El Gobierno de la Ciudad no quiere cambios importantes
Un día antes del encuentro entre Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta, el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, afirmó que el distrito no considera "necesario" por el momento adoptar nuevas medidas de restricción ante el aumento de casos de coronavirus de las últimas semanas.
"Nosotros en la ciudad no estamos tomando ninguna medida de restricción. Existen algunas medidas que restringen algunas actividades todavía y algunas otras medidas que a través de protocolos provocan algunas limitaciones. Pero por encima de eso no vemos que sea necesario tomar alguna medida adicional", subrayó Miguel.
El jefe de Gabinete de la Ciudad sostuvo: "Nosotros estamos haciendo todo este esfuerzo para preservar nuestra prioridad número 1, que es la educación presencial".
"Vamos a hacer todo el esfuerzo para sostener las clases. Y la segunda prioridad es el trabajo, sostener el empleo. El 2020 fue durísimo y recién estamos empezando a levantar cabeza", enfatizó el funcionario porteño. Miguel sostuvo, además, que "la reunión de mañana se trata de retomar la agenda de la pandemia, producto de los nuevos casos de contagios".
El encuentro de este sábado en la Quinta de Olivos entre el Presidente y el Jefe de Gobierno será clave porque la relación se quebró en septiembre pasado cuando la Casa Rosada anunció sorpresivamente la quita de fondos de coparticipación a la Ciudad.
Posse pide no tocar la economía, ni la educación
El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, consideró que "hay que controlar las reuniones sociales" pero "de ninguna manera tocar la estructura productiva ni la educación" con las medidas que puedan aplicarse en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) ante el rebrote de Covid-19.
Posse se refirió así a la reunión que mantendrán este sábado el presidente Alberto Fernández y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para evaluar la situación sanitaria y remarcó la necesidad de "funcionar bien en las relaciones sociales y el comercio con los protocolos", antes de aplicar algún tipo de restricción más estricta.
"Hay que controlar las reuniones sociales, de ninguna manera tocar la estructura productiva ni la educación", sostuvo el jefe comunal en declaraciones a la señal A24, al tiempo que consideró que en las escuelas se debe "trabajar con burbujas" de manera "intermitente".
El dirigente radical atribuyó la suba de casos de coronavirus de los últimos días en buena medida a los encuentros y reuniones sociales y subrayó la importancia de "cuidar el tema de no producir aglomeraciones".
Consultado sobre el intercambio de críticas del pasado viernes entre el Presidente y dirigentes de Juntos por el Cambio por la compra de vacunas, Posse opinó que "el cruce en el medio del rebrote causa vergüenza ajena".
"Me parece que tenemos que cerrar el frente todos, oposición y oficialismo, para tener una muy buena política exterior, una política de Estado, para acceder a la vacuna", sostuvo el mandatario comunal.
Por otro lado, afirmó que "en Buenos Aires se avanzó, es sostenida la vacunación" y sugirió que por esa razón "hay que tener paciencia", tras lo cual agregó: "Nadie desea que esto vaya mal desde la oposición, queremos ser gobierno para que esto se haga bien, pero sobre la base de que se haga bien ahora".