En diálogo con Radio Del Plata, el dirigente gremial fustigó la decisión de la presidencia del Senado que "primero hizo los decretos (para cesantear) y después creo la comisión" para investigar los casos.
"Hay mucha hipocresía, esto es una política de Estado y la quieren dibujar diciendo que hay ñoquis para justificar que van a echar trabajadores, porque quieren un estado chico. Esta es una política que ya la vivimos. Que lo digan, así sabemos qué enfrentamos", agregó.
Por otra parte, calificó a la medida como "aberrante desde el punto de vista jurídico", ya que los despedidos "eran planta permanente y vienen a trabajar todos los días".
Por último, señaló el ejemplo de lo sucedido en la Cámara de Diputados ante una situación similar, cuando se dio marcha atrás y los trabajadores accedieron a hacer "una auditoría, que era lo que había que hacer".
"Nosotros estamos en alerta y movilización", advirtió Britos en diálogo con radio La Red y amplió: "Yo, como representante de trabajadores, lo que no voy a permitir es el atropello".
El jefe sindical consideró que "la vicepresidenta tomó una decisión errónea" con las cesantías, porque el "eslogan" de Cambiemos en la campaña era "consenso y diálogo".
En esa línea, protestó al asegurar que el gremio "no" recibió "ninguna" notificación "oficial" respecto de la medida que promovió Michetti. "Si ellos quieren hacer una gestión clara, de cara a la sociedad, yo creo que estos temas se tendrían que haber llevado a la paritaria y todavía no la abrimos a la paritaria", resumió.
Ayer, la vicepresidenta de la Nación, Gabriela Michetti, firmó la rescisión de más de 2.000 contratos laborales avalados por su antecesor, Amado Boudou, entre enero y noviembre del año pasado, lo que ascendería la nómina del Senado a más de 6.000 empleados.
"Hay mucha hipocresía, esto es una política de Estado y la quieren dibujar diciendo que hay ñoquis para justificar que van a echar trabajadores, porque quieren un estado chico. Esta es una política que ya la vivimos. Que lo digan, así sabemos qué enfrentamos", agregó.
Por otra parte, calificó a la medida como "aberrante desde el punto de vista jurídico", ya que los despedidos "eran planta permanente y vienen a trabajar todos los días".
Por último, señaló el ejemplo de lo sucedido en la Cámara de Diputados ante una situación similar, cuando se dio marcha atrás y los trabajadores accedieron a hacer "una auditoría, que era lo que había que hacer".
Por su parte, Claudio Brito, de ATE Congreso señaló que desde ayer están "en estado de alerta y movilización".
El secretario general de ATE Congreso alertó a Michetti que el gremio "no" va a "permitir el atropello", aunque dijo que el sindicato "no" está en desacuerdo sobre la auditoría impulsada por la vicepresidenta, pero reclamó "participación" de su organización en la comisión conformada en ese sentido.
"Nosotros estamos en alerta y movilización", advirtió Britos en diálogo con radio La Red y amplió: "Yo, como representante de trabajadores, lo que no voy a permitir es el atropello".
El jefe sindical consideró que "la vicepresidenta tomó una decisión errónea" con las cesantías, porque el "eslogan" de Cambiemos en la campaña era "consenso y diálogo".
En esa línea, protestó al asegurar que el gremio "no" recibió "ninguna" notificación "oficial" respecto de la medida que promovió Michetti. "Si ellos quieren hacer una gestión clara, de cara a la sociedad, yo creo que estos temas se tendrían que haber llevado a la paritaria y todavía no la abrimos a la paritaria", resumió.
Ayer, la vicepresidenta de la Nación, Gabriela Michetti, firmó la rescisión de más de 2.000 contratos laborales avalados por su antecesor, Amado Boudou, entre enero y noviembre del año pasado, lo que ascendería la nómina del Senado a más de 6.000 empleados.