Naftas, gasoil y GNC sufrieron una grave caída de ventas en el primer semestre, en medio de los fuertes aumentos, la inflación y el rumbo económico del Gobierno.
Según un informe elaborado por la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA), el nivel de ventas de combustibles en el país cayó un 3,51% en el primer semestre de 2016 con relación al mismo período de 2015.
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El dato más preocupante es el del gasoil. Las ventas cayeron un 12,43% en el primer semestre del año. La información la brindó la confederación que reúne a estaciones de servicio de todo el país, en base a números del Ministerio de Energía. En abril pasado, las ventas de ese combustible llegaron a tener un retroceso del 23,14%.
Al respecto, el presidente de CECHA, Carlos Gold, dijo a El Litoral: "Esta situación marca que hay cierto estancamiento en la actividad económica". Los camiones y medios de transporte de carga son los que tienen motores diesel que utilizan gasoil. Gold se reunió ayer con el ministro de Energía, Juan José
Aranguren.
El GNC, en tanto, mostró un comportamiento similar: en el primer semestre retrocedió 5,65%, mientras que registró en junio la caída más notable del año, por encima del 13%.
En este escenario está amenazado el futuro del 51% de las estaciones de servicio del país, que venden menos de 250.000 litros mensuales, y casi una de cada tres bocas que expenden GNC.
El informe además señala que entre enero y junio de 2015 esas bocas de expendio tenían una participación de 69% en las ventas, que cayó al 65% en el mismo período de este año.
La venta de nafta súper se mantuvo relativamente estable, pero una parte de los automovilistas se pasaron a la premium, el producto más caro del mercado, sobre todo en el primer trimestre.
En febrero, por ejemplo, ese combustible trepó más del 12%, si bien entre abril y junio también cayó.
Lo mismo pasó con el gasoil premium, cuyas ventas crecieron por encima del 15% en el segundo mes del año. Este dato podría estar relacionado a la eliminación de impuestos a los autos de alta gama y a la suba de ventas de este tipo de autos, que consumen esa nafta.