El mundo de la televisión y el espectáculo está de luto: murió una de las actrices históricas de la pantalla chica a los 67 años. La noticia se dio a conocer en la jornada del martes 11 de febrero, causó conmoción tanto en el público como en colegas del ambiente y la despiden con pesar a través de las redes sociales.
Una reconocida actriz argentina falleció a los 67 años y dejó un gran vacío en la televisión argentina. Tras 45 años de carrera y participar de decenas de series y películas, la artista perdió la vida por razones que aún se desconocen y la noticia fue comunicada por la Asociación Argentina de Actores en sus redes sociales.
Se trata de Pía Uribelarrea, reconocida por sus papeles en Esperando la carroza, Casados con hijos, Poliladron, Cebollitas, entre otras producciones nacionales. "Con profunda tristeza despedimos a nuestra afiliada, la actriz Pía Uribelarrea. Nuestras sentidas condolencias a sus seres queridos", subraya el comunicado de la Asociación Argentina de Actores.
Pía Uribelarrea se formó con nombres icónicos de la actuación, como Lito Cruz, Hedy Crilla, Luis Agustoni, Augusto Fernandes, Carlos Moreno, Tina Serrano y Julio Chávez. No solo eso, sino que perfeccionó su profesión tomando clases de canto con Rodolfo Valss y Gachi Leibovich; de danza con Rubén Cuello, Adriana Barenstein y María Amuchástegui; y expresión corporal con David Di Napoli y María Inés Azzari.
Tristeza en el espectáculo por lo que se supo de Edda Díaz: "Dios quiso"
La actriz Edda Díaz es una de las artistas más reconocidas del teatro y una de las pioneras del café concert en Argentina. Y a sus 83 años recordó su dura infancia hasta llegar a la actuación, marcada por el dolor: "Me dieron pocos años de vida y acá estoy".
Edda Díaz reapareció en los medios y dio una entrevista a Radio Rivadavia con motivo de Anecdotario Edda Díaz, una serie en la que recorre sus grandes momentos en el espectáculo, y reveló que sus primeros años de vida fueron muy tristes: “Yo nací en Tucumán, en un pueblo que ahora es una ciudad grande. (...) Yo soy un milagro de Dios. Nací en mi casa de Tucumán un día de 45 grados de calor y con muy poquito peso, solo un kilo novecientos, pese a no ser prematura. Como subsistí con ese calor y sin incubadora, no lo sé. Pensaban que me iba, yo contaba esto con mucho humor en un espectáculo, pero mi familia no tenía muchas esperanzas en ese momento. Dios quiso que no partiera y, gracias a él y las oraciones de mis padres, me quedé".
Sobre los golpes que recibió en su infancia, Edda Díaz sostuvo: "Los diez primeros años de mi vida fueron muy difíciles. Todo el tiempo decían: ‘¿Se nos va o no se nos va?’ Mi mamá se vino acá a Buenos Aires y consiguió otro tipo de médicos, otros tratamientos y más esperanzas. También tenía problemas de visión. Tenía diagnóstico de ceguera. Le dijeron a mi madre que yo a los 15 iba a quedar ciega y gracias a Dios no fue así. Mi mamá luchó tanto hasta que , cuando yo tenía 10 años, consiguió un médico que me operó. Perón había mandado 100 médicos a estudiar a Japón para aprender un método que se había creado allá. En la córnea se ponía un pedacito de placenta. Me operaron en el mismo año tres veces y solo salió bien la primera, pero me detuvo el avance de la miopía y el fantasma de la ceguera desapareció. Fui a la única persona que esa operación le dio resultado, pero a mí me cambió la vida".
“Hace mucho más de 50 años que me dedico al teatro, soy actriz en todas sus formas. Hice cine, la teve, la radio… Enseñé, escribí, dirigí, cree personajes… Todo tiene la misma madre: el teatro. Ejercí mi profesión desde el humor, el clown, la tragedia, el drama, el unipersonal, la dramaturgia, la revista, el grotesco… He hecho un poco de todo, desde Sofovich a Molière, pasando por textos de mi autoría y de otros. He iniciado la época del café concert con Antonio Gasalla y Carlos Perciavale", compartió Edda Díaz en otro fragmento de la entrevista en la que repasó sus hitos en el teatro y la televisión.