Una importante fábrica de calzado despidió trabajadores en medio de las fiestas, reduciendo aún más el personal que viene achicándose este año. Desde la firma apuntan directamente a las medidas del gobierno de Javier Milei que provocaron una crisis económica.
Son seis los trabajadores despedidos de la fábrica Arluchi S.A (conocida comercialmente como IDS Suelas) de Chivilcoy, que se suman a los 21 que quedaron en la calle entre octubre y noviembre de este año. Con esta reducción, la planta quedó solamente con 25 operarios.
"Esto se dio debido a la baja demanda de consumo y la competencia directa y desleal de la importación por la apertura indiscriminada", expresó el CEO de la empresa, el brasilero Andrei Rober Soul al medio Buenos Aires/12.
En ese sentido, agregó: "Los despidos, por más tristes que sean para la empresa y obviamente trabajadores, son la forma de intentar reestructurarnos para poder seguir".
También aseguró que "la relación entre la empresa y el sindicato es muy respetuosa, tratamos siempre tener comunicación fluida, pero a veces es imposible satisfacer las necesidades de ambos, pero se trata de lograr un consenso".
Asimismo, desde el sector señalan que además de la caída del consumo y la apertura de importaciones, e agregan ahora dos nuevos problemas adicionales. Por un lado, el crecimiento del contrabando, por la vulnerabilidad de las fronteras en la actualidad y la importación puerta a puerta con plataformas como Temu y Shein.
La bronca de los trabajadores
“Nos enteramos el día jueves, vía telefónica a través de uno de sus directivos; camino a CABA hacia la marcha federal contra la reforma laboral”, señalaron desde el gremio al medio La Razón de Chivilcoy.
Fuentes del Ministerio de Trabajo confirmaron que los despidos se realizaron mediante acuerdos individuales al 100 por ciento conforme a la antigüedad, interviniendo en los casos de los trabajadores que se presentaron en la delegación.
Asimismo, señalaron las consecuencias negativas de la apertura de importaciones y la caída del consumo, remarcando que “están todos los negocios explotados de productos importados y no hay ventas”.
Arluchi llegó de la mano del gigante Paquetá, del que es proveedor global, con una inversión importante, en la primera década del siglo. En sus inicios operó dividida en dos unidades —Rubber Soul (caucho) y Arluchi (EVA)—, que se fusionaron operativamente en 2019 bajo el paraguas del Grupo IDS, con la marca IDS Suelas como identidad comercial.
