Hace apenas tres años, el presidente, Mauricio Macri, anunciaba en el foro económico de Davos millonarias inversiones de la empresa Coca Cola en Argentina para los próximos años. Ahora, Coca Cola-FEMSA, embotelladora de la reconocida gaseosa, se encuentra en una grave crisis.
Allá por 2016, El CEO de la empresa de gaseosas, Muhtar Kent, había prometido que iba a invertir U$S 1000 millones en el país durante cuatro años. Además, se había comprometido a "trabajar juntos" en un programa a favor del deporte y del desarrollo y la capacitación de mujeres en microemprendedurismo.
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Incluso en 2018, el Presidente recibió a los máximos directivos de Coca-Cola Latinoamérica, quienes le anunciaron una ampliación del plan de inversiones de la empresa en Argentina por U$S 1200 millones para los próximos tres años. Hasta el director ejecutivo, James Quincey, le comunicó al Jefe de Estado el interés de la compañía por producir frutas en Entre Ríos, con más posibilidades en cítricos, y trabajar en la búsqueda de microclimas aptos para su desarrollo.
Sin embargo, por estas horas, la firma hizo efectivo el Procedimiento Preventivo de Crisis ante la Secretaría de Trabajo, lo que pone en riesgo cientos de puestos de trabajo. La reducción de personal afecta a más del 15% de los trabajadores en empresas de menos de 400 trabajadores; a más del 10% en empresas de entre 400 y 1.000 trabajadores; y a más del 5% en empresas de más de 1.000 trabajadores.