Los británicos enfrentarán un aumento significativo en los pagos de la hipoteca, según lo anunciado hoy por el Banco de Inglaterra y se estima que casi un millón de hogares tendrán que pagar al menos 500 libras esterlinas, unos US$ 647 al mes hasta fines de 2026.
Se estima también que más de dos millones de hogares paguen entre 200 (US$ 259) y 499 libras (US$ 649) adicionales al mes en los próximos años.
Esto se debe a los esfuerzos del Banco por reducir la inflación que se mantiene estancada en 8,7% anual, mediante el aumento de las tasas de interés que llevó a un incremento en las tasas hipotecarias.
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De hecho, la tasa promedio de una hipoteca fija a dos años alcanzó un máximo de 15 años del 6,7%, según la Moneyfacts, que consignó la BBC.
En el corto plazo, se estima que los hogares que salgan de acuerdos de tasa fija tendrán que pagar alrededor de 220 libras más al mes (US$ 285) si refinancian a las tasas actuales.
La mayoría de las hipotecas contratadas en los últimos años han sido a tasa fija de dos o cinco años, lo que significa que hay un retraso en el impacto de los recientes aumentos en las tasas sobre los hogares, indicó el informe del medio británico.
Se estima que alrededor de 4,5 millones de hogares ya han experimentado un aumento en los pagos de la hipoteca desde fines de 2021, y se espera que las tasas más altas afecten a la gran mayoría de los hogares restantes para fines de 2026.
Por otro lado, el Banco advierte en su informe mensual que los titulares de hipotecas podrían enfrentar dificultades para realizar los pagos de sus préstamos.
Sin embargo, se espera que los prestamistas sean lo suficientemente sólidos como para soportar un aumento en los incumplimientos de pagos.
El aumento en los pagos de la hipoteca tendrá un impacto significativo en los británicos.
Se estima que los hogares y las empresas recorten el gasto debido a los mayores costos de endeudamiento, lo que podría empeorar el entorno económico.
Además, existe un mayor riesgo de incumplimiento en los préstamos.
Sin embargo, el Banco de Inglaterra instó a los bancos a apoyar a los hogares que enfrentan dificultades para realizar los pagos, lo que ayudaría a reducir el riesgo de incumplimiento.
Además, las normas de préstamo más estrictas implementadas desde 2014 han limitado la acumulación de deuda hipotecaria, lo que ha aumentado la resiliencia de los prestatarios.
El aumento de las tasas de interés y los pagos de la hipoteca en el Reino Unido impactarán en los británicos, quienes se enfrentarán a mayores costos y podrían experimentar dificultades financieras.
Sin embargo, se espera que los bancos brinden apoyo y que las regulaciones ayuden a mitigar los riesgos crediticios.
Con información de Télam
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