Estuvo casi dos años en una colonia penal rusa por protestar contra el presidente Vladimir Putin, pero tuvo que pasar casi otra década -y la invasión a Ucrania- antes de que Maria Alyokhina decidiera que era hora de abandonar su país.
Alyokhina es miembro del colectivo artístico feminista Pussy Riot, que indignó a las autoridades rusas en 2012 al ponerse pasamontañas de colores vivos y entonar una "oración punk" contra Putin frente a una catedral de Moscú.
Esta primavera boreal, tras una serie de breves pasos por prisión y un periodo de arresto domiciliario a raíz de un tuit de apoyo al encarcelado crítico del Kremlin Alexei Navalny, se escabulló de un apartamento de Moscú disfrazada de mensajera de comida y consiguió huir del país a través de Bielorrusia.
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Ahora pasa la mayor parte de su tiempo de gira con las Pussy Riot en un espectáculo que describe como una "llamada a la acción" en apoyo a Ucrania.
"Somos rusas, no elegimos dónde nacer, pero tenemos derecho a elegir cómo vamos a vivir y qué cuestiones vamos a defender", dijo Alyokhina, de 34 años, en una entrevista antes de una actuación en Cambridge.
"Creemos que Ucrania debe ganar esta guerra. Y esto no es sólo una cuestión de Ucrania, es algo que es lo más importante para toda Europa porque es una tragedia europea", agregó.
Alyokhina describe a Putin y a su entorno como hombres que sólo entienden el lenguaje de la fuerza, diciendo que el sistema patriarcal de Rusia está en el centro del problema. "Esta guerra la empezó un hombre y todo el círculo de Putin son hombres. Nosotros, como país, no tuvimos ninguna mujer como líder político durante un siglo".
Alyokhina se muestra impaciente con los líderes occidentales que prefieren tratar con suavidad a Putin por miedo a que pueda escalar el conflicto. Compara esa postura con la de decir a las víctimas de la violencia doméstica que no deben "provocar" a sus agresores.
"Las armas nucleares y el peligro de una guerra nuclear existen, por supuesto, pero esto no es una razón para no defender a Ucrania, porque si Ucrania pierde esta guerra habrá más países atacados. También probablemente con armas nucleares".
"Así que no hay que dar nada a los abusadores. Hay que romper cualquier diálogo y conexión con ellos", dijo Alyokhina, en declaraciones en inglés.
Alyokhina afirma que Rusia es culpable de crímenes de guerra -término que también han utilizado Ucrania, la Casa Blanca y la Unión Europea- y que en algún momento deberá enfrentarse a un ajuste de cuentas, como en los juicios de Nuremberg a los jerarcas nazis. Moscú niega haber atacado a civiles o haber cometido crímenes de guerra.
"Rusia debería pasar por lo mismo que pasó Alemania tras la Segunda Guerra Mundial", señaló.
Con información de Reuters