Alberto Fernández se contagió de coronavirus y está aislado en la Quinta de Olivos. Desde allí, el presidente brindó una entrevista en la que dio detalles del momento en el que presentó síntomas y aseguró que todavía espera el resultado del PCR para ratificar la enfermedad y la cepa que lo aqueja.
“Me siento bien. Lo mío fue casi preventivo porque ayer estuve lo más bien, estuve tocando a la guitarra, comiendo con Fabiola (Yáñez). A la noche tuve un dolor de cabeza medio raro, un dolor molesto, estaba acalorado. Me tomé la fiebre y tenía 37,3. Llamé a mi médico y me hicieron un test rápido por precaución y ese test dio positivo", contó el mandatario, que también aclaró que se realizó un PCR del que todavía no recibió el resultado.
En ese sentido, Alberto Fernández sostuvo que lo recibirá "en el transcurso de la tarde" y que le dirán "la cepa del contagio". Aun así no dudó en llevar calma respecto a su estado de salud y aseguró que se siente bien: "Recién se fue el médico, me revisó íntegramente. No tengo ningún síntoma preocupante, estoy bien”.
"No tengo la menor idea de cómo me contagié. Se que hubo en la Quinta de Olivos algún caso acá en la cocina, pero me dijeron que cuando hubo contagio no tuvieron contacto conmigo. Revisé si alguien con quien haya estado en los últimos 15 días cayó contagiado y no lo encontré. Creo que debe servirnos para que todos entendamos el riesgo que corremos”, reflexionó el jefe del Ejecutivo, quien se encuentra aislado en la "casa de huéspedes".
Además, el mandatario frenó todo argumento antivacuna y reveló lo que los médicos le dicen respecto a cómo sería su estado sin las dosis de la Sputnik V: “Me dicen los médicos que la vacuna generó una cantidad de anticuerpos importantes como para que yo en este momento no la esté pasando como una persona de 62 años que se contagia, que en los primeros días expresa su dolencia. Si no fuera por la vacuna la estaría pasando muy mal”
“Mi mayor preocupación es que podamos vacunar cuanto antes a los mayores de 60. Estamos asegurando cada semana una cantidad de vacunas para, poco a poco, se va acelerando el ritmo de vacunación. En un mundo donde la vacuna es un problema. La OMS se quejó de la lentitud de llegada de vacunas a Europa. Nosotros somos un país privilegiado que recibe cada semana dosis de vacuna”, afirmó, en diálogo con AM 750.
En cuanto a quienes ven en la vacuna de Pfizer una hipotética salvación, el mandatario fue categórico en resaltar que le “hubiera encantado comprar la vacuna de Pfizer pero Pfizer no nos la quiso vender, por las exigencias contractuales que ponía. Y los que cedieron a las condiciones contractuales tampoco las están recibiendo”.
El presidente hoy tenía una reunión en Olivos con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que por motivos del aislamiento quedó suspendida. Sin embargo, Alberto Fernández deslizó que lo llamará esta tarde. “Quisiera que hagamos algo para frenar (la circulación de virus) en al área metropolitana. También se que la sociedad tiene muchas dificultades para volver a soportar un encierro. Ahora cuando uno mira el mundo, es lo que está ocurriendo. En el mundo hay toque de queda. Lo que me parece oportuno es volver a hablar con Horacio y Axel para que diseñemos algo juntos”, concluyó.