Todo quedó registrado en una grabación. Un patrullero de Lanús avistó un "auto de alta gama negro" que corría picadas y se lanzó a su persecución. Tras varias cuadras de seguimiento a alta velocidad, el patrullero logró detener el vehículo. Cuando los oficiales procedieron a identificar a quienes corrían la picada, se dieron cuenta de que también eran agentes de la Policía y los liberaron.
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"Son dos efectivos policiales jugando picadas (...) Lo conozco, labura acá con nosotros", se escucha claramente en el audio.
Luego, se puede apreciar que uno de los efectivos que realizó la detención dice: "Ya está, ya los liberé".
Desde el comando, le responden: "Habría que cagarlos a trompadas".
Según versiones periodísticas, el agente que corría picadas y los dos oficiales que lo liberaron fueron separados de la fuerza.
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