El funcionario subrayó que "todo el mundo debería desear lo mismo que la Iglesia, que se tenga elecciones transparentes y se respete la voluntad popular, y no creo que (esa advertencia) sea dirigida a una persona, ni un gobierno determinado, un país ni un continente determinado".
Así lo expresó en su habitual encuentro con periodistas al ingresar a Casa de Gobierno, al ser consultado sobre el documento de la Conferencia Episcopal Argentina, difundido ayer, en el que se lamentó que el proceso eleccionario se desarrolle en una "clima de agravios, sospechas y denuncias que debilitan la credibilidad de personas e instituciones".
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Para Fernández, "lo que dice la Iglesia es lo que uno está buscando que suceda y cualquier argentino de bien debe pensar exactamente lo mismo" y esa "una definición urbi et orbi (para todos)".
"Cualquier hombre y/o mujer de bien tiene que coincidir con ese pensamiento de la Iglesia Católica", concluyó.
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