La Cámara de Apelación en lo Civil y Comercial de San Isidro falló a favor de un vecino bonaerense que fue mordido por un perro en octubre del 2020. Cinco años después, la Justicia estableció que los dueños del animal deberán pagarle una indemnización de más de $780.000 y hacerse cargo de su tratamiento psicológico por un año.
Tras dos instancias judiciales: un hombre atacado por un perro va a recibir una indemnización
La resolución llegó en la segunda instancia. El afectado había presentado una denuncia por daños y perjuicios al remarcar que el incidente le provocó heridas en la zona posterior de su pierna izquierda. Además, denunció que había quedado incapacitado físicamente y que el ataque le generó un "daño moral y la necesidad de un tratamiento psicológico".
En la primera instancia, la Justicia consideró que el perro mordió al denunciante sin una provocación previa de su parte y estableció una indemnización de $786.000, con los intereses por el paso del tiempo y los gastos del proceso. Sin embargo, la víctima apeló a la primera resolución al considerar que los montos no alcanzaban a compensar el daño psicológico y moral que le generó el ataque. Además, el denunciante se mostró disconforme con la desestimación de la incapacidad física, argumentando que el peritaje demostró la existencia de heridas y de alteraciones estéticas.
El detalle de lo que estableció la Justicia
Durante la segunda instancia, la Cámara de Apelaciones consideró:
- Se mantiene la indemnización de $786.000 (dentro de ellos $150.000 por daño moral, los gastos del proceso y los intereses por el paso del tiempo) al señalar que el sufrimiento, más la atención médica y el reposo son afecciones que necesitan una reparación.
- Se suma una indemnización por daño psicológico: la familia del perro deberá pagarle tratamiento psicoterapéutico durante 12 meses, con una frecuencia semanal. Tras revisar el informe del perito médico legista, el tribunal reconoció que el demandante presentaba un trastorno de adaptación y estaba deprimido.
Un perro lo mordió y recibirá una indemnización de $786.000 y un año de tratamiento psicológico
- Rechazaron indemnizarlo por incapacidad física (que el demandante pretendía que fuera mayor). Las pericias médicas demostraron que el hombre no quedó con secuelas funcionales (su pierna funciona perfectamente). Además, aunque el hombre pedía dinero extra por el "daño estético" de las cicatrices, los jueces determinaron que, al no ser desfigurantes, ni afectar su capacidad de trabajar, ese daño ya estaba "absorbido" dentro del monto del daño moral.
