Ahora que pasó gran parte de lo que tenía que pasar y bajaron en algo las especulaciones y los malos entendidos y las señales pervertidas con el propósito de confundir, entretener y especular, para tenerlos a todos en ascuas escuchando mentiras, es momento de sentarme y contarles que estuvo pasando en Bolivia.
Fui tomando y tachando notas día por día, con el único fin de contar aquello que no sale en las “internacionales”.
Aquí van los hechos de la política menuda, con el desorden que merece el clima de catástrofe que se llevó por delante a los bolivianos, hora tras hora.
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Son las once de la mañana del lunes 15 de marzo en la muy fría y andina ciudad de La Paz, y Jeanine Añez es ingresada a la cárcel de mujeres. Se le dictó prisión preventiva de cuatro meses mientras dure la investigación de responsabilidades por el Golpe de Estado de noviembre del 2019. Junto con ella fueron remitidos con la misma suerte, dos de sus ministros.
La prensa boliviana titula con signos y un léxico que Rinconet envidiaría: “El gobierno persigue opositores”, “el gobierno encarcela a opositores por el supuesto “golpe de estado””, “vuelve la dictadura castrochavista”.
Esto dicen mientras Jeanine Añez declara desde la fiscalía: “mal que le pese a Evo Morales, tengo pues privilegios!”. La forma montaraz de Jeanine, choca contra el modo remilgado de los paceños, y hay quien piensa que llevarla de los 34 grados de Trinidad, Beni, a los 7 grados de La Paz, la afectó en algo, pero sin embargo uno de los privilegios fue dar una conferencia de prensa, tras las rejas, para comunicar que estaba incomunicada injustamente por orden de la dictadura, y agregó: “tengo el apoyo de mi pueblo, tengan fe en Dios, ya construiremos una Bolivia democrática. Oremos”.
La curia boliviana en consonancia, acompaña la fervorosa oración: “La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) pide la liberación de la expresidenta Jeanine Añez, sus exministros y exjefes policiales y militares, aprehendidos dentro de las investigaciones iniciadas por el caso del presunto 'golpe de Estado'”. Así, entre comillas, y agregó: “ el gobierno se presenta como víctima pretendiendo tachar de golpistas a los que defendieron el voto ciudadano y la democracia”, y para completar el cuadro y que no falte nada al desquicio general, la presidenta de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, salió la semana pasada a proponer una marcha para pedir la libertad de los militares acusados, y completó la faena hoy, declarando que “El año pasado sentimos el orgullo de tener unas Fuerzas Armadas del lado del pueblo”.
Creer o reventar.
Pero así y todo, a este Guernica le faltan varias pinceladas todavía.
Por ejemplo, toda la prensa fue a que Añez pudiera decir desde las rejas, que estaba incomunicada, pero a pesar de que la policía la encontró en un cajón adentro de un sommier, en una casa que no era la suya, ningún periodista ninguna cámara, ningún micrófono entró a su casa a ver si dormía en una cama, o si tenía mesa de luz o almohadas, o si usaba baño con ducha, ni descubrieron que usaba zapatillas de marca. Se entiende; Jeanine, como todo el mundo sabe, es rubia.
La siempre golpista prensa boliviana se limitó a preguntar: “doña Jeanine, que tiene para decir?”. Pregunta que sirvió para titular: “JEANINE AÑEZ ES IMPLICADA EN EL CASO RENUNCIA DE EVO”.
Ahora bien, pensemos en un país donde el MAS gana las elecciones nacionales con una mayoría tan enorme como inimaginada.
Y ahora pensemos en ese mismo país, donde los ejecutores del golpe, ganan, un par de meses después, las elecciones a gobernadores y alcaldes más importantes del país, con una mayoría también impensada. Y donde aquellas que no ganaron aun, van a segunda vuelta de aquí a poco.
Y ahora pensemos en un país que desde el año 2014, tuvo una elección por año. Y donde los golpistas ganadores de alcaldías y gobernaciones, amenazan al gobierno con un nuevo golpe de Estado (que ellos llaman “resistencia a la dictadura castrochavista”) si continua el juicio por el golpe de Estado.
Queda claro el apoyo que tienen del club de amigos. La reinstalada (por Añez) embajada de EE UU, soltó un comunicado que reza: “Animamos a nuestros amigos y vecinos de Bolivia a sustentar todos los derechos civiles y las garantías del debido proceso de la Convención Americana sobre DD HH y bla bla bla” y no, no es de noviembre del 2019. Es de ahora.
Almagro ni se tomó el trabajo de redactar: hizo copy-paste y ofreció una comisión que ayude a investigar. Bolsonaro antes de leer la última línea, salió en zaga. Y claro, el inefable e incasable itinerante Guaidó (a quien Añez reconoció como presidente) también dijo algo, pero no me acuerdo qué.
Paréntesis: si se quedaron pensando en cómo los golpistas ganaron con gran margen en las más importantes ciudades y departamentos del eje central, tras haber perdido la elección nacional, no olviden que Banzer fue presidente de facto y luego, tras una dictadura con muertos, exiliados y Plan Cóndor, volvió a ser presidente por el voto popular, con las reglas de juego de ese momento.
Sigo.
Una de las victimas más dramáticas de la dictadura de Añez fue, sin duda, Patricia Hermosa, quien encarcelada en estado de gestación y encadenada a una cama, se le negó asistencia mientras se desangraba sin remedio en un colchón de paja: perdió su embarazo en prisión.
La perversión llego a que publicaran una foto de ella en ese estado, para advertencia de “los masistas”.
Patricia publicó hoy un texto casi amoroso “…no temas Jeanine, tendrás comida, agua, y médicos si lo necesitas. Tendrás todo aquello que nos fue negado…”.
Hoy el ministro de Justicia, Iván Lima, sale a explicar los pasos de un juicio no anunciado con anterioridad, y que será largo y conflictivo. Más allá de ser un hombre de mucha inteligencia jurídica, forma parte de un gobierno que no tiene ni plan, ni política ni estrategia de comunicación. Un viejo problema nunca resuelto del Movimiento al Socialismo. El mismo problema que le permite a los golpistas, ganar elecciones y que hoy azuza al gobierno con una fórmula que ya usó en el año 2008.
La derecha más conservadora del mundo (aun sin unidad) se alinea tras un discurso, mientras el gobierno anda tratando de atajar silabas.
El MAS tiene el gobierno y la oposición el discurso, y como dicen en el oriente boliviano: “de nuevo la chancha a los choclos!”
Quizá, cuando (cuando será!) acabe este cuento, Jeanine Añez sea recordada por tuits como “ Lula va a la cárcel”, o “Cristina! ¿Pensaste que no tenías que rendir cuentas ante la justicia?” o quizá solo se mencione de ella aquel inolvidable discurso en el congreso, cuando soltó con grandes ínfulas: ”a los del MAS les digo…hoy están el poder, pero como dijo Einstein, todo lo que sube, baja!”.
En fin, estas son hasta hoy, las noticias de Bolivia.