Golpe en Moscú: mataron con un coche bomba al jefe de operaciones del Estado Mayor ruso

El jefe de la dirección de operaciones militares del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, el teniente general Fanil Sarvárov, fue asesinado este lunes en un atentado con coche bomba en el sur de Moscú.

22 de diciembre, 2025 | 17.39

Un atentado de alto perfil sacudió la seguridad interna de Rusia. Fanil Sarvárov, uno de los máximos estrategas del Ejército del Kremlin, murió tras la detonación de un artefacto explosivo colocado en su vehículo particular. El hecho fue confirmado por el Comité de Instrucción de Rusia (CIR) y replicado por el medio alemán Deutsche Welle (DW).

El ataque ocurrió en la calle Yásenevo, en un barrio del sur de la capital rusa. Según la investigación oficial, una mina magnética fue adherida a los bajos del automóvil del militar. Sarvárov logró conducir algunos cientos de metros desde su estacionamiento, ubicado a solo 150 metros de su vivienda, antes de que la bomba se activara y acabara con su vida.

Svetlana Petrenko, portavoz del CIR, informó a través de Telegram que se abrió una causa penal por "asesinato y tráfico ilegal de sustancias explosivas". Si bien los peritajes forenses y la revisión de cámaras de seguridad están en curso, los investigadores trabajan sobre una hipótesis principal: la responsabilidad de los servicios de inteligencia de Ucrania.

El general asesinado era un objetivo de alto valor. Nacido en 1969, Sarvárov tenía un historial de combate extenso que incluía las guerras en Chechenia y Siria. Su nombre figuraba desde 2022 en el sitio web ucraniano Mirotvorets, una base de datos no oficial que lista a los considerados "enemigos de Ucrania".

Una seguidilla de ataques

Este asesinato no es un hecho aislado, sino que se suma a una serie de atentados selectivos contra la cúpula militar rusa desde el inicio de la invasión. Ucrania ya había reivindicado acciones similares que terminaron con la vida de otros altos mandos, como el teniente general Yaroslav Moskalik y el teniente general Ígor Kirílov, encargado de la defensa radiológica y química.

El presidente Vladímir Putin fue informado de inmediato sobre el suceso. El mandatario ya había criticado anteriormente a sus propios servicios secretos por las fallas en los protocolos de seguridad para proteger a los altos mandos del Ejército, quienes se convirtieron en blancos vulnerables incluso dentro de las fronteras de Moscú.