Guardias indígenas en la Amazonia unen esfuerzos ante las amenazas a sus territorios

10 de diciembre, 2025 | 10.33

Antes de diseñar estrategias para defender sus tierras ancestrales, unos 200 guardias pertenecientes a unas quince comunidades y pueblos indígenas de Ecuador, Colombia y Perú bebieron agua de la planta ancestral yokó y purificaron sus energías con tabaco y hojas de ortiga.

Las comunidades indígenas en la selva amazónica han entrenado a hombres y mujeres para identificar las amenazas a sus tierras -ricas en minerales y vegetación-, realizar largos recorridos y evitar que personas ajenas invadan su hogar.

En 2017, la guardia indígena en la comunidad ecuatoriana A'i Cofán, en Sinangoe, cerca a la frontera con Colombia, inició una lucha contra la minería, argumentando que la industria estaba dañando el río Aguarico, la fuente de alimento de las familias que viven en sus riberas.

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Desde entonces, su lucha ha rendido algunos frutos, pero el trabajo de defensa del territorio es diario, dijo Holger Quenamá, coordinador de la guardia indígena de la comunidad A'i Cofán de Sinangoe, a Reuters.

"La guardia de Sinangoe siempre vamos con nuestra lanza, que es nuestra fuerza", dijo Quenamá, durante un encuentro de guardias indígenas la primera semana de diciembre en Sinangoe.

"Estamos trabajando con toda la comunidad, pero hay grupos indígenas que estamos más vigilantes y activos para hacer el recorrido de todo el territorio". 

En Perú hay unos 300 guardias indígenas repartidos en 24 comunidades amazónicas del pueblo Shipibo Konibo, que luchan por combatir la pesca ilegal y las invasiones.

"Los pueblos indígenas no estamos en contra de los acuerdos de concesión, pero deben reconocer que están dentro de nuestro territorio", dijo Kelly Valera Silva, presidenta de la Organización Regional de Guardias Indígenas de Shipibo-Konibo.

Con los recorridos de la guardia indígena en esa comunidad, la pesca ilegal ha ido disminuyendo, dijo la líder indígena. Ahora la guardia, a la que se han sumado muchas mujeres, sigue vigilando el territorio dos veces por semana.

Las guardias indígenas también buscan reconocimiento de las autoridades como defensores de sus propios territorios y evitar que les estigmaticen, señalen y persigan.

En los últimos años se han sumado nuevas amenazas para los territorios ancestrales de los tres países. Las guardias indígenas deben prepararse para enfrentar la intervención de grupos armados ilegales, reclutamiento forzado y extorsiones, dijeron los líderes indígenas.

Con información de Reuters