La máxima corte de Brasil abrió este viernes una investigación formal contra el presidente Jair Bolsonaro, quien deberá responder por el delito de prevaricato. Se lo investigará por supuestamente haber estado al tanto de un caso de corrupción en la compra de vacunas Covaxin y no haberlo denunciado a las autoridades judiciales.
La solicitud había sido hecha al mediodía por el subprocurador general de la República, Humberto de Medeiros. La apertura de la investigación se suma al "superpedido" de impeachement por 123 violaciones a la Constitución que presentaron la oposición, de derecha e izquierda, ante el Congreso.
Los detalles de la investigación
El objetivo de la investigación es esclarecer si existieron irregularidades en el contrato de intención de compra firmado entre el gobierno federal y la empresa india Bharat Biotech para la adquisición de 20 millones de dosis de la vacuna Covaxin.
El caso tiene relación con la denuncia del encargado de importación de vacunas del MInisterio de Salud, Ricardo Miranda, hermano del diputado bolsonarista Luis Miranda, quien dijo haber recibido presiones por parte del ala política de la cartera para firmar rápidamente un contrato con 1.000 por ciento de sobrefacturación en la compra de vacunas Covaxin.
Los hermanos Miranda relataron bajo juramento a la comisión del Senado, que investiga al gobierno en su rol en la pandemia, que le avisaron a Bolsonaro del escándalo el pasado 20 de marzo, pese a lo cual el mandatario no hizo la denuncia que debía a la Policía Federal. Ahora, la Policía deberá encargarse de interrogar al presidente en el escándalo por la compra de vacunas indias contra el coronavirus.
El contrato con las empresas para comprar vacunas Covaxin fue suspendido esta semana tras la explosión del escándalo y ahora Bolsonaro deberá dar respuestas. La decisión ocurre horas antes de que este sábado, en más de 300 ciudades del país, la oposición se junte para reclamar la renuncia y el juicio político del presidente ultraderechista.