El comandante de la Guardia Revolucionaria iraní advirtió el jueves a Israel que no atacara a la República Islámica en represalia por el ataque con misiles, mientras su archienemigo intensificaba su ofensiva en Líbano contra Hezbolá, milicia apoyada por Teherán.
Los temores a una extensión del conflicto han aumentado a medida que Israel planea su respuesta al ataque con misiles perpetrado por Irán el 1 de octubre tras los ataques aéreos israelíes contra milicianos aliados de Irán.
"Os decimos (a Israel) que si cometéis cualquier agresión contra cualquier punto (nuestro) atacaremos dolorosamente el mismo punto vuestro", dijo Hossein Salami en un discurso televisado, y añadió que Irán puede penetrar las defensas de Israel.
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El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, habló el miércoles con el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, sobre las operaciones de Israel en Líbano y Gaza, con el objetivo de evitar una guerra regional. El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abás Araqchi, aterrizó en El Cairo para entrevistarse con representantes egipcios en el marco de una gira por Oriente Próximo en un momento de tensión creciente.
La Unión Europea celebró su primera cumbre con los países del golfo Pérsico y emitió un comunicado en el que hacía un llamamiento a la calma: "Subrayamos la importancia del compromiso diplomático con Irán para lograr una desescalada regional".
Israel no da señales de relajar sus campañas militares contra Hezbolá en Líbano y Hamás en Gaza, a pesar de los repetidos llamamientos al alto el fuego, y ha prometido castigar a Irán por su ataque del 1 de octubre.
Irán y sus aliados en Oriente Próximo —Hezbolá en Líbano, Hamás, los hutíes en Yemen y algunos grupos armados en Irak— afirman que no darán marcha atrás ante la implacable presión del ejército más avanzado y poderoso de la región.
El alcalde de una ciudad importante del sur de Líbano se encontraba entre las 16 personas que murieron el miércoles cuando un ataque aéreo israelí destruyó su sede municipal, en el mayor ataque contra un edificio oficial del Estado libanés desde que comenzó la campaña aérea israelí.
Las autoridades libanesas denunciaron el incidente, en el que también resultaron heridas más de 50 personas en Nabatieh, capital de provincia, y afirmaron que era una prueba de que la campaña de Israel contra el grupo armado Hezbolá estaba pasando a tener como objetivo al Estado libanés.
Los israelíes "atacaron intencionadamente una reunión del consejo municipal para debatir la situación de los servicios y el socorro en la ciudad" para ayudar a los desplazados por la campaña israelí, dijo el primer ministro en funciones, Nayib Mikati.
Israel y Hezbolá llevan un año combatiendo desde que el grupo miliciano comenzara a disparar misiles contra su archienemigo en apoyo del grupo islamista palestino Hamás de Gaza.
El comisario de la Unión Europea para la Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, afirmó que la "respuesta brutal" de Israel al ataque de Hamás que inició la guerra había provocado una devastadora crisis humanitaria en Gaza que ahora continuaba en Líbano.
"Se ha atacado y matado a trabajadores humanitarios, a cientos de ellos. No hay seguridad ni protección que permita que el trabajo humanitario se organice de manera satisfactoria", dijo a Reuters al margen de un acto de la ASEAN en Yakarta, y calificó de "sumamente insuficiente" la provisión de suministros humanitarios.
EEUU ATACA A LOS HUTÍES
Estados Unidos dijo el miércoles haber atacado cinco almacenes subterráneos de armas en zonas de Yemen controladas por los hutíes, el último de más de una decena de ataques estadounidenses contra objetivos vinculados a los hutíes este mes.
Los combatientes hutíes de Yemen alineados con Irán, que dicen actuar en solidaridad con los palestinos en la guerra de un año de Israel en Gaza, han llevado a cabo desde noviembre casi 100 ataques contra barcos que cruzan el mar Rojo.
Israel también lanzó ataques contra la ciudad portuaria siria de Latakia, a orillas del Mediterráneo, a primera hora del jueves, según informaron los medios de comunicación estatales sirios.
Las operaciones israelíes en Líbano han causado la muerte de al menos 2.350 personas en el último año, según el Ministerio de Sanidad, y han desplazado a más de 1,2 millones de personas. La cifra de muertos no distingue entre civiles y combatientes, pero incluye a cientos de mujeres y niños.
Alrededor de 50 israelíes, tanto soldados como civiles, han muerto en el mismo periodo, según Israel.
LAS FUERZAS DE PAZ INFORMAN DE MÁS DISPAROS
Israel ha sido objeto de escrutinio por su trato con las fuerzas de paz de la ONU en el sur de Líbano.
La misión de la ONU en Líbano (FINUL) dijo que sus fuerzas de paz observaron el miércoles por la mañana como un tanque israelí disparaba contra su torre de vigilancia cerca de Kfarkela, en el sur de Líbano. Dos cámaras se destruyeron y la torre resultó dañada, según la FINUL.
El ejército israelí dijo que se estaba investigando el incidente, el último de una serie de ataques que, según la FINUL, han tenido como objetivo a sus soldados.
"Los emplazamientos de infraestructuras y las fuerzas de la FINUL no son un objetivo y cada incidente irregular será examinado a fondo", dijo el ejército, que añadió que Hezbolá ha estado operando desde "emplazamientos que han sido construidos dentro y adyacentes a los puestos de la FINUL durante muchos años".
Israel ha pedido a Naciones Unidas que traslade a los miembros de las fuerzas de mantenimiento de la paz de la FINUL del sur de Líbano fuera de la zona de combate, por su seguridad.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, de visita en el norte de Israel, cerca de la frontera, dijo que Israel no detendría su asalto a Hezbolá para permitir negociaciones.
"Solo mantendremos negociaciones bajo fuego. Lo dije el primer día, lo dije en Gaza y lo digo aquí", dijo, según un comunicado de su oficina.
(Informes de Laila Bassam y Timour Azhar en Beirut, Maayan Lubell en Jerusalén, Stanley Widianto en Yakarta y John Irish; textos de Costas Pitas, Lincoln Feast y Michael Georgy; edición de Stephen Coates y Philippa Fletcher; edición en español de Jorge Ollero Castela)