Love Actually se estrenó en 2003, convirtiéndose en un clásico del cine romántico y navideño. Pese a tener muchos fans, que revisitan la película año tras año en la época navideña, el director Richard Curtis no está satisfecho con algunos detalles de su cinta.
"Hay cosas que cambiaría. Pero, gracias a Dios, la sociedad está cambiando. Mi película está destinada en algunos momentos a quedarse desfasada. La falta de diversidad me hace sentir incómodo y un poco estúpido", declaró el realizador a The Guardian.
"Hay un amor extraordinario que sucede cada minuto de muchas maneras en todo el mundo. Esto me hace desear que mi película fuera mejor; me hace desear que hubiera hecho un documental solo para observarlo", añadió. Con un elenco repleto de estrellas que incluye a Hugh Grant, Liam Neeson, Colin Firth, Laura Linney, Emma Thompson, Alan Rickman y Keira Knightley, entre otros, la película sigue las historias de amor de varias parejas en Londres.
La comedia romántica recaudó casi 246 millones de dólares en todo el mundo en el momento de su lanzamiento, pero a lo largo de los años, muchos fans y expertos han criticado la película por su falta de diversidad, teniendo solo un miembro del reparto que no es blanco, Chiwetel Ejiofor, y por su enfoque en las relaciones románticas heterosexuales. La actriz Martine McCutcheon, quien encarnó a Natalie en Love Actually, también dio anteriormente su opinión sobre esta falta de diversidad. "Creo que, sinceramente, fue hace 20 años y el mundo cambió mucho, pero también creo que parte del encanto de la película fue el hecho de que algunas de las historias de amor y los personajes no eran perfectos", declaró a MailOnline.
- Con información de Europa Press.
Hugh Grant desató su odio hacia una de las escenas más icónicas de su carrera: "Insoportable"
Hugh Grant es uno de los protagonistas de Love Actually (Realmente amor), la popular comedia romántica de 2003 escrita y dirigida por Richard Curtis. En la película, uno de esos clásicos básicos navideños, el actor dio vida al primer ministro británico y dejó para el recuerdo una escena que recientemente calificó de "insoportable".
En la escena que pasó a la historia como una de las mejores de Hugh Grant se puede ver al personaje en el 10 de Downing Street al ritmo de Jump de The Pointer Sisters. "Lo leí en el guión y pensé 'bueno, voy a odiar hacer eso'. No me apetecía hacer el baile en absoluto, y mucho menos ensayarlo", confesó Grant en una entrevista en el especial The Laughter & Secrets of Love Actually: 20 Years Later, emitido en ABC News.
A su vez, Richard Curtis reveló que Grant inicialmente "no paraba de decir que no" filmaría la escena y aseguró que estaba "malhumorado" el día del rodaje. "Creo que esperaba que enfermara o algo así y que dijera 'oh, bueno, qué pena, tendremos que perder esa secuencia de baile'", agregó el realizador, pero Grant no consiguió salirse con la suya.
"No tenía ritmo, especialmente al principio, cuando muevo el culo", señaló Grant. "Hasta el día de hoy, hay mucha gente, y estoy de acuerdo con ellos, que piensa que es la escena más insoportable jamás grabada en el celuloide. Pero a algunas personas les gusta", concluyó el actor.