Beto Casella está en uno de sus mejores momentos como profesional. Asentado en la televisión y radio desde hace años, siendo referente de diferentes generaciones en horarios cruciales de audiencia, el conductor de Bendita también le tiene miedo al paso del tiempo.
En una entrevista con Clarín, Beto Casella reconoció su temor a envejecer y deteriorarse dando como ejemplo una situación personal: "A mí cualquier cosa me conecta con la finitud. Pero le tengo más miedo al deterioro. Por ahí tengo un grano en la espalda y ya pienso que es un melanoma y que es malo y me voy a morir. La otra vez en un asado con amigos estaban todos charlando y de repente les pregunto: “Che ¿ustedes piensan en el final, cómo lo van a encarar?” “No”, me dijeron. Y siguieron con lo suyo. Ni bola me dieron".
Por otra parte, Beto Casella también se refirió a su pasado frustrado como futbolista y narró: "Sí, hubiera sido un buen 9. Todos los varones que jugamos al fútbol creemos que el fútbol se perdió un gran valor. Jugamos con mis amigos al fulbito una vez por semana. Y jodemos mientras estamos cambiándonos, pre calentando y miramos hacia el buffet a ver si hay un tipo con cara de empresario que nos vea y nos lleve a jugar afuera...".
Beto Casella, el trabajador multifacético
Destacando diferentes profesiones a lo largo de su vida (NdeR: vendió libros, paraguas y camperas de cuero, entre otras cosas), el líder del prime time en El Nueve aseguró: "Sí, donde me pongan voy a tratar de rendir, voy a tratar de aprender lo básico y tratar de hacer mi propia historia, con mi estilo y estar a la altura. Yo me la hubiera rebuscado en cualquier profesión. Vine con la tecla de la intuición bastante afinada, que es lo único bueno que tengo. Yo no tengo ningún talento especial, ni en la tele ni en radio, para durar tanto, sin pecar de falsa modestia".
El feminismo en la vida de Beto Casella
"Debe ser algo de familia. Ya a los 15 no entendía el rol del ama de casa, el por qué una mujer tenía que dedicar su vida para que se desarrollara el tipo. Yo creo haber visto a mi vieja lavarle los pies a mi viejo. Y eso que era una tana con carácter. Estaba todo armado para la felicidad del varón. No me parecía un formato muy justo", explicó Beto Casella, levantando la bandera del feminismo y adhiriéndose al mismo.