La carne vacuna o el pollo congelado pueden salvar muchas comidas, pero es necesario saber por cuánto tiempo se puede guardar en el freezer antes de que sea peligroso consumirla. También es muy importante el proceso de descongelamiento al que se expone la carne una vez que es retirada del frío.
Congelar la carne permite alargar su vida útil conservando su calidad y sus nutrientes intactos, siempre y cuando se sigan algunas recomendaciones para garantizar estos aspectos. Así no es necesario comprar carne nueva siempre que se quiera consumir y se puede hacer un favor a la economía del hogar.
La congelación conserva los alimentos durante períodos prolongados de tiempo porque previene el crecimiento de microorganismos patógenos que pueden causar deterioro o enfermedades. De este modo, los alimentos congelados pueden aguantar bastante tiempo en el freezer sin pudrirse. Aún así, no duran para siempre.
Según la cantidad de grasa que concentre la carne que se quiera congelar, el tiempo que duren en el freezer con la misma calidad que cuando fueron compradas será distinto. En todos los casos, duran menos tiempo congeladas y en buen estado que las verduras.
- La carne muy grasa y los embutidos aguantan de 1 a 2 meses.
- Las hamburguesas y otras preparaciones con carne picada fresca, de 3 a 4 meses.
- Los cortes de ternera, cordero y cerdo, de 4 a 12 meses.
- El pollo, el pavo y la carne de otras aves soportan de 9 a 12 meses.
Cómo mantener la calidad de la carne intacta
Si bien con el congelamiento se frena la reproducción bacteriana, las reacciones de oxidación continúan y la grasa sigue su proceso de enranciado. Esta es la principal causa de la pérdida del valor nutricional de la carne. Para que la calidad de la carne no se vea afectada y la pérdida nutricional sea la mínima es conveniente tener en cuenta:
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La temperatura adecuada del freezer.
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Congelar los alimentos al vacío, envueltos en film o dentro de recipientes adecuados.
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Congelar la carne en paquetes o porciones pequeñas para que el congelamiento sea parejo.
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Separar la grasa visible de los cortes para que su enranciado no estropee el resto de la carne.
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Congelar la carne cocinada o los guisos con carne en recipientes de plástico o cristal herméticos y esperar a que estén fríos antes de meterlos en el freezer.
La forma adecuada de descongelar
Para no estropear el buen trabajo al momento de congelar, es importante garantizar un buen descongelamiento. Las carnes congeladas deben descongelarse en frío. No es una buena idea dejarlas a temperatura ambiente, ni tampoco cerca de una fuente de calor para acelerar el proceso.
Esto puede propiciar el crecimiento de bacterias patógenas para la salud, de acuerdo con una investigación publicada en la revista Current Opinión in Infectious Diseases. Lo ideal es bajar la carne a la heladera 24 horas antes o, si no se cuenta con ese tiempo, usar la opción para descongelar que tiene programada el microondas.
Una vez descongelada, sí o sí hay que cocinar la carne. No se puede volver a congelar cruda, pero sí cocida. Cuando la carne vuelve a acercarse a las temperaturas de 4° a 6° las bacterias reanudan su reproducción.
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