El que fue centrocampista del Liverpool, del Real Madrid, del Bayern de Múnich y de la selección española Xabi Alonso se pasea por la banda en una lluviosa noche de viernes en San Sebastián dando instrucciones a sus nuevos pupilos, el equipo juvenil de la Real Sociedad, que juega en la segunda división española.
Puede parecer un puesto humilde para un grande como Alonso, ganador de la Copa del Mundo, dos campeonatos de Europa, la Liga de Campeones con el Liverpool y títulos de la liga nacional con el Real y el Bayern, pero el jugador de 39 años no podría estar más contento.
"Volví porque soy de aquí, me siento muy de aquí y llevaba muchos años fuera. No fue una transición difícil de jugador a entrenador. La tomé yo con mucha calma. Cuando lo probé vi que me gustaba pero no sentía esta necesidad de entrenar en Primera División", dijo a Reuters en una entrevista al día siguiente.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
"Si tiene que llegar un día llegará. Pero veo como un proceso. De conocerme, de perfeccionarme, de hacer muchos errores. Igual aquí es un sitio donde tienes un poco más de margen", dijo Alonso con una sonrisa tras dirigir el entrenamiento de su equipo en Zubieta, el campo de entrenamiento de la Real Sociedad.
Alonso cumple su tercera temporada al frente del segundo equipo, al que ha llevado a la Segunda División del fútbol español por primera vez en más de 60 años.
En el partido del viernes por la noche, los jugadores del primer equipo de la Real Sociedad Mikel Merino y Mikel Oyarzabal -ambos internacionales españoles- y el excentrocampista del Real Madrid Asier Illarramendi y el portero Alex Remiro estaban sentados en las gradas observando el partido.
La mayoría de ellos también fueron jugadores del segundo equipo en su juventud, antes de dar el salto al primer equipo.
"Realmente este salto a primer equipo es difícil pero se está naturalizando mucho. Sienten que el Sanse ha sido hasta hace poco su equipo, su familia, pues tienen este vínculo", explicó Alonso.
A pesar de contar con jugadores como el exveterano del Manchester City David Silva, el delantero sueco Alexander Isak o el internacional belga Adnan Januzaj, la Real Sociedad pretende que al menos el 60% de sus jugadores del primer equipo procedan de su cantera.
De hecho, muchos de sus mejores jugadores han nacido o crecido cerca de San Sebastián y han pasado años en Zubieta, donde se encuentra el complejo de entrenamiento, antes de convertirse en profesionales, un proceso que Alonso respeta claramente.
"Dos misiones. Ser soporte para el primer equipo, preparar los jugadores para que cuando el primer equipo necesite estén preparados. Pero a la vez estamos en segunda división y tenemos que competir", afirma.
"Lograr los dos es un reto muy difícil y apasionante. Nos lleva al límite en el día a día para planificar nuestro trabajo. Un nivel de exigencia muy grande pero es bueno porque aprendo todos los días con ello".
Gracias a su reputación y a los resultados obtenidos en su corta etapa como entrenador de las categorías inferiores de la Real Sociedad, Alonso es consciente de que su nombre puede ser demandado por los clubes de élite que están buscando entrenadores. Pero no parece tener prisa por firmar en otro sitio.
Con información de Reuters