Es de público conocimiento el terrible accidente que sufrió Fede Bal en Brasil, pero hasta hoy se había mostrado fuerte y con un gran sentido del humor. El actor volvió al país y apenas se encontró con la prensa rompió en llanto. Su madre, Carmen Barbieri, y su novia, Sofía Aldrey lo acompañaron en su viaje de regreso donde también hubo un médico que estuvo pendiente de él durante todo el vuelo.
Como era de esperarse, Fede Bal fue recibido por la prensa que quería tener la palabra del actor luego de semejante aventura que le tocó vivir. Para sorpresa de muchos, el conductor de Resto del Mundo rompió en llanto en diálogo con Flor de la V. El hijo de Carmen Barbieri expresó: "Yo hablo cero portugés y empecé a jugarles, a hacerles chistes a las enfermeras y al doctor como para que un poco se pongan buena onda conmigo y entiendan que no podía hablar nada".
Notablemente emocionado y con un nudo en la garganta, Fede Bal agregó: "El tipo me agarró la mano... Me pongo a llorar porque tuve mucho miedo. El tipo me dijo que llega mucha gente con muchos accidentes así y no la cuentan porque es un deporte de mucho riesgo, yo no sabía que era de tanto riesgo. Mucha gente muere por año en este tipo de cosas y la verdad es que podría haber sido mucho peor".
Previo a eso, el actor reveló que más allá de ver el daño que se causó en su brazo por la fractura expuesta que sufrió, tenía miedo de tener alguna afección interna también. Según su palabra, el golpe fue tan fuerte que no sabía que más podría tener lastimado. Varias personas le expresaron que realmente había sido un milagro que pueda contar su experiencia ya que muchos mueren en el intento de practicar este deporte.
Cómo fue el operativo de rescate de Fede Bal
Cuando la conductora le preguntó por el operativo que se montó en torno a su accidente para ayudarlo a "Cuando pasó esto, me querían operar ahí mismo y yo no quería porque la salita no daba mucha confianza. Me corté el brazo en cuatro partes, tengo los huesos todos rotos, de a poco va a soldar”.
Con respecto al traslado hasta Río de Janeiro, Fede Bal explicó: "Ese trayecto fue terrible porque encima había que parar a cargar nafta y yo decía ‘es joda, ¿no pueden meterle un poco más rápido?’. Me paraban al lado de la ruta a ponerme inyecciones porque por el dolor que tenía ya estaba en otro plano”.