Qué es sofreír, saltear y freír: las diferencias entre cada técnica

La cocina tiene distintas técnicas y cada receta requiere la suya. En este caso te explicamos la diferencia entre freír, sofreír y saltear.

23 de octubre, 2020 | 13.16

Muchas recetas suelen pedir técnicas variadas a la hora de trabajar nuestros alimentos con aceites o materias grasas. Es por eso que te vamos a mostrar las diferencias entre freír, sofreír y saltear y la forma correcta de realizarlas.

Diferencias entre sofreír, saltear y freír

Freír

Quizás sea la técnica más conocida, pero no está de más aclarar cómo se realiza. Cuando hablamos de freír nos referimos a la cocción de un alimento crudos durante varios minutos en aceite o materia grasa a alta temperatura. 

Si bien parece simple, lograr una buena fritura requiere de estar atentos a los detalles. En principio debemos tener los alimentos bien secos, para evitar la reacción del aceite al contacto con agua; también se deben sacudir los excesos de harina o preparaciones para rebozar; otro punto fundamental es mantener la temperatura estable, por lo que se recomienda freír en tandas no muy grandes y colocar, al menos entre 2 y 3 centímetros de aceite en la sartén. La temperatura ideal depende del alimento: en caso de productos de cocción larga se estima en 120 a 140 grados, mientras que para precocinados es de 150 y para cocción rápida, unos 180.

Sofreír

A diferencia de su técnica hermana, sofreír implica una fritura ligera de un alimento, sin completar su cocción. Esto permite terminar de cocinar los productos con otra técnica. Se suele utilizar en caso de ajos, cebollas y algunas especias para extraer sus esencias.

En este caso se debe hacer casi todo lo contrario a la fritura. Para sofreír debemos usar poco aceite y a una temperatura menor a los 100 grados, de forma que nuestro alimento no se cocine por completo y pueda liberar sus jugos. Un detalle importante en esta técnica no descuidarse para evitar que se queme o se pasen de cocción en apenas unos segundos

Saltear

La técnica del salteado es en sí muy similar a la de soferír, pero con una diferencia sustancial: la temperatura. En este método se usa la mínima cantidad de aceite o materia grasa necesaria para lubricar los alimentos, que se someten a una temperatura de entre 175 y 225 grados. Debido al nivel de calor, es muy importante mantener los elementos en constante movimiento para evitar que la preparación se arruine.

Algunos consejos que pueden servirte para realizar un salteado son: utilizar una sartén amplia y de paredes altas, ya que te permitirá tener una sola capa de alimentos en contacto con el fondo de la misma y evitará que los alimentos se caigan al removerlos; el tiempo de cocción es muy corto, por lo que es necesario cortar los alimentos en porciones pequeñas para que logren su punto.